martes, 1 de diciembre de 2009

CAPÍTULO X: SENDERO LUMINOSO EN EL SIGLO XXI

Hoy, a más de un cuarto de siglo de iniciada la guerra por la red terrorista Sendero Luminoso contra el Estado peruano nos preguntamos: ¿Sus emboscadas y ataques terroristas durante el último lustro, significan un rebrote de dicha red terrorista? ¿Por qué razones esta acción terrorista está ahora focalizada en el Huallaga y el Valle de los Ríos Apurímac y Ene (VRAE)? ¿Por qué sigue analizándose el fenómeno de las redes terroristas cuantitativamente, con un enfoque orientado sólo a sus capacidades militares? ¿Las emboscadas y los continuos hostigamientos a personal militar y policial, así como el ataque contra la base policial de la Dirección de Operaciones Especiales en San José de Secce, en Huanta, Ayacucho, constituyen hechos indubitables de que la red terrorista Sendero Luminoso está recuperando sus capacidades operativas en el ámbito rural? ¿Quiénes conforman sus mandos políticos y militares? ¿En qué está hoy Sendero Luminoso? ¿Cuáles son las principales manifestaciones doctrinarias del tipo de guerra que hoy desarrollan contra el Estado peruano?Formulamos estas preguntas, para conocer y comprender las manifestaciones doctrinarias y operativas de esta red terrorista en el siglo XXI, pues fluye de declaraciones de altos funcionarios del Estado, de titulares noticiosos y de documentos que han sido evacuados por los Estados Mayores y analistas de Inteligencia —publicitados por diversos medios— que sigue sin entenderse no sólo a la red terrorista Sendero Luminoso después de la captura de Abimael Guzmán Reinoso, sino también a la que hace más de 29 años dio inicio a un proceso de guerra popular prolongada en el Perú. En efecto, de los diversos análisis y comentarios que se vienen dando con relación a sus acciones militares durante el último lustro, se puede verificar el uso indebido del término “rebrote”, lo cual no es cierto. ¿Por qué?Porque dicha red terrorista nunca se fue del escenario nacional, pues es un virus ideológico muy adaptable que puede ser contenido, mas no existe vacuna contra el mismo, ya que está inmerso en el tejido social, y si esto es así no puede hablarse de un “rebrote” terrorista. Lo que ha sucedido es que, como consecuencia de los fuertes y contundentes golpes que recibió durante el gobierno del presidente Fujimori, Sendero Luminoso ingresó en un proceso de hibernación estratégica en lo militar, orientando todos sus esfuerzos en la reconstitución organizacional, operativa y doctrinaria del partido dando un mayor énfasis a los aspectos políticos —hecho que se evidencia notoriamente— con un cambio en la actitud que viene adoptando para aproximarse a la población en las zonas rurales, a fin de ganar su apoyo mostrando una nueva imagen más amable y menos. violenta. Y en las ciudades, mientras se renueva doctrinariamente, realiza una paciente labor clandestina de recuperación, capacitación de cuadros y proselitismo encubierto para evitar ser detectado por los servicios de Inteligencia. ¿Con qué propósitos? Ya lo explicaré.
Han transcurrido 17 años desde que la DINCOTE capturara al máximo cabecilla senderista, Abimael Guzmán Reinoso, y vemos que la guerra aún continúa, claro está, por otros medios; medios en los que el factor militar no es lo primordial. Ello no implica de modo alguno que hayan abandonado la lucha armada, pues el nuevo esquema estratégico de “pasar de tiempos de guerra a tiempos de paz”, no significa de ninguna manera claudicar o tener que dejar de combatir. Lo que sucede es que por ahora esta nueva estrategia les demanda cambiar las formas de lucha orientando sus esfuerzos en implementar y corisolidar la Ofensiva Legal (OL); la Guerra Política (GP) y el Accionar de los Organismos de fachada (AOF). Son pacientes, y están observando la agudización de las contradicciones al interior del actual sistema, y por ende, la creación de condiciones objetivas y subjetivas para reiniciar con fuerza la lucha armada. ¿Cuándo? Pronto lo sabremos. En esa línea de pensamiento la ecuación de la Guerra Revolucionaria (GR) que nos presenta esta red terrorista en el siglo XXI es como sigue:
ECUACIÓNPRIMERA DÉCADA DEL SIGLO XXI
GR= OL x GP x AOF x ATG
FACTORES PRIVILEGIADOS POR SENDERO LUMINOSO
OL x GP x AOF
(COMPONENTES NO MILITARES)
FACTOR PRIVILEGIADO POR EL ESTADO PERUANO
ATG
(COMPONENTE MILITAR)
Entonces, podemos señalar con toda claridad que hoy para la red terrorista Sendero Luminoso, la Guerra Revolucionaria (GR) tiene como primer y más importante factor de la ecuación a la Ofensiva Legal (OL) que ha desatado contra el Estado peruano, seguido por la Guerra Política (GP) como el otro componente paralelo al primero; y además el Accionar de los Organismos de Fachada (AOF) como tercer factor complementario a los precedentes y finalmente por Acciones Terroristas y Guerrilleras (ATG), las cuales por ahora son esporádicas en determinadas áreas geográficas del país.
Por tanto, el nuevo esquema estratégico de la Guerra Revolucionaria (GR) que viene practicando Sendero Luminoso —durante los nueve primeros años del siglo XXI— privilegia en ese orden los tres componentes no militares de la ecuación, más que a las Acciones Terroristas y Guerrilleras (ATG) que momentáneamente, enfatizamos, son esporádicas y focalizadas en el Huallaga y el VRAE.
La Ofensiva Legal (OL), que como primer factor de la ecuación viene desarrollando esta red terrorista contra el Estado peruano, se caracteriza por la inteligente utilización que hace —según el lenguaje marxista— de las entidades que conforman la superestructura estatal para maquiavélicamente debilitar a través de ellas al propio Estado y sus instituciones, las que buscan destruir a fin de poder construir —sin límite de tiempo— la República Popular de Nueva Democracia, e implantar el comunismo en el país.
El primer gran objetivo de esta Ofensiva Legal (OL) senderista ha constituido el desmontar toda la legislación en materia de lucha contra el terrorismo, legislación que se promulgara duranteel gobierno del presidente Fujimori como parte de la estrategia integral que implementó para hacer frente a las redes terroristas. ¿Cómo? Cuestionando la constitucionalidad de los Decretos Leyes que regulaban el delito de traición a la patria, en razón de que atribuyen competencia a los tribunales militares para juzgar a los civiles que hayan cometido dicho delito, lo que consideran dizque atentatorio del derecho al Juez Natural.
¿Por qué el empeño por alcanzar este objetivo? Pues para lograr la anulación de todas las sentencias condenatorias ejecutoriadas, que fueron dictadas por la Justicia Militar contra sus jefes, mandos, cabecillas, dirigentes y principales integrantes de los comandos operativos de aniquilamiento de Sendero Luminoso, así como de los juicios orales que estaban en giro; y a su vez para que se declare la insubsistencia de todas las acusaciones fiscales en procesos penales seguidos por el supradicho ilícito penal ante jueces y fiscales con identidad secreta (léase jueces sin rostro) del Fuero Privativo Militar y ante la jurisdicción penal ordinaria. Asimismo, para derogar, o cuando menos debilitar, la legislación de guerra diseñada en la década de los 90 en defensa del Estado peruano. Es decir, el propósito fundamental y lógico de dicha Ofensiva Legal (OL) es lograr la libertad de los principales dirigentes de Sendero Luminoso.¿Cómo lograron desarrollar este objetivo? Utilizando los llamados “organismos generados”, particularmente el organismo abierto denominado “Comité de Familiares de Detenidos y Prisioneros de Guerra Detenidos”, ente a través del cual lograron reunir a más de cinco mil ciudadanos con firmas debidamente certificadas por el Registro Nacional de Identificación y Estado Civil (RENIEC). Al amparo de lo dispuesto por el inciso 5° del artículo 203 de la Constitución Política del Estado, la persona de Marcelino Tineo Silva, y más de cinco mil ciudadanos, patrocinados por Manuel Fajardo Cravero –abogado de Abimael Guzmán–interpusieron una acción de inconstitucionalidad ante el Tribunal Constitucional contra los Decretos Leyes N° 25475, 25659, 25708, 25880, y sus normas complementarias y conexas promulgadas durante el gobierno del presidente Fujimori para la lucha contra el terrorismo. Alegan la inconstitucionalidad, desde su origen, porcuanto dizque no fueron aprobados y promulgados en la forma establecida por la Constitución de 1979.
¿Qué obtuvieron? Que el órgano de control de la Constitución mediante sentencia expedida en el Expediente N° 010-2002-AI/ TC a los tres días del mes de enero de 2003, en sesión del Pleno Jurisdiccional del Tribunal Constitucional y con asistencia de los magistrados Javier Alva Orlandini, presidente; Juan Bardelli Lartirigoyen, vicepresidente; Guillermo Rey Terry, Manuel Aguirre Roca, Delia Revoredo Marsano, Magdiel Gonzales Ojeda y Víctor García Toma, FALLE: declarando INFUNDADA la excepción de prescripción deducida por el Procurador General de la República en defensa del Estado peruano, y que estaba a cargo de los intereses del Congreso de la República –como sujeto procesal–al contestar la demanda incoada en que pedía que estando al mérito de dicha excepción se declare INADMISIBLE la acción de inconstitucionalidad presentada por el representante legal de la red terrorista Sendero Luminoso, Marcelino Tineo Silva, y cinco mil ciudadanos.Sostenía el Procurador como fundamento de su petición que el 24 de junio de 1996, fecha en que quedó constituido el Tribunal Constitucional, el plazo de prescripción de acciones de inconstitucionalidad era de 6 meses, por lo que, tratándose de decretos leyes publicados antes de dicho mes, el plazo para interponer la demanda contra las normas impugnadas prescribió el 24 de diciembre de 1996. Pero no valió ese fundamento del representante del. Estado y se declaró INADMISIBLE las cuestiones planteadas en su excepción de prescripción contra dicha demanda senderista, en base a un inaudito puritanismo jurídico.Además, se declara FUNDADA, en parte, la acción de inconstitucionalidad interpuesta y, en consecuencia: declararon inconstitucionales el artículo 7 y el inciso h) del artículo 13 del Decreto Ley N° 25475 así como la frase “con aislamiento celular continuo durante el primer año de detención” y luego “En ningún caso, y bajo responsabilidad del Director del establecimiento, los sentenciados podrán compartir sus celdas unipersonales, régimen disciplinario que estará vigente hasta su excarcelación”, del artículo 20 del Decreto Ley N° 25475. También es inconstitucional el inciso d) del artículo 12 del mismo Decreto Ley N° 25475.Asimismo, declaran que son inconstitucionales los artículos 1°, 2°, 3°, 4°, 5° y 7° del Decreto Ley N° 25659. También la frase “O TRAICIÓN A LA PATRIA” del artículo 6° del mismo Decreto Ley N° 25659 y los artículos 1°, 2° y 3° del Decreto Ley N° 25708; así como los artículos 1° y 2° del Decreto Ley N° 25880. Finalmente, son también inconstitucionales los artículos 2°, 3° y 4° del Decreto Ley N° 25744.También, exhorta al Congreso de la República para que, dentro de un plazo razonable, reemplace la legislación correspondiente, a fin de concordar el régimen jurídico de la cadena perpetua con lo expuesto en dicha sentencia en los fundamentos jurídicos N° 190 y 144, así como para que establezca los límites máximos de las penas de los delitos regulados por los artículos 2°, 3°, inciso b) y c); y 4°, 5° y 9° del Decreto Ley N° 25475, conforme a lo expuesto en el fundamento jurídico N° 205 de la referida sentencia.A fin de poder conocer en profundidad quiénes son los actores de la Ofensiva Legal (OL) senderista, sus vinculaciones y ramificaciones, así como los vasos comunicantes con los internos de esta red terrorista (que estuvieron purgando condena por delito de traición a la patria y luego por terrorismo, y que ahora están en libertad–gracias a dicha ofensiva–, o que aún permanecen recluidos), sólo haría falta que la Dirección Nacional de Inteligencia (DINI) tuviera la imaginación necesaria –como ente rector del Sistema de Inteligencia Nacional– para realizar el esfuerzo de búsqueda correspondiente, con el objetivo de poder desentrañar el hilo de la madeja, y conocer los entretelones de cómo se articuló y ejecutó impecablemente esta operación senderista y establecer qué podría pasar, como un estimado de inteligencia predictiva.¿Qué debería hacer la DINI? Tiene dos caminos para lograr ese propósito: el lento y el rápido. Veamos:El primero, recurrir al clásico trámite burocrático que caracteriza a la administración pública, el cual es parsimonioso como el caminar de una tortuga, y que consistiría en que el Director Ejecutivo de la DINI oficie al Procurador General de la República a cargo de la defensa legal de los asuntos e intereses del Congreso de la República para que remita una copia de la acción de inconstitucionalidad que interpusiera contra el Estado peruano la persona de Marcelino Tineo Silva, adjuntando el CD-ROM con la relación nominal de los cinco mil ciudadanos que registraron sus firmas en el padrón respectivo y luego fueron certificadas por la RENIEC.
El segundo, que sería el más expeditivo por la rapidez para poder obtener la información requerida, es que el Director Ejecutivo de la DINI se comunique telefónicamente con dicho Procurador Público, que es un funcionario del Estado, y lo requiera a fin de que en el término de la distancia atienda su pedido, pues aquel sólo necesita recurrir a su archivo y sacar del expedientillo que tiene en su poder, por haber sido un sujeto procesal, la copia de esos documentos y constituirse al local de la DINI en Las Palmas, o en su defecto brindárselos a un oficial de enlace comisionado para recibirlos.
Los abogados de los dirigentes de Sendero Luminoso están ganando la Ofensiva Legal (OL) y recurren a todas las instancias para hacer pública sus diferentes denuncias.
Luego, ¿qué hacer con dichos documentos? Llamar al Director de Contrainteligencia de la DINI para que con un programa especial que hay en la Base de Datos ingrese al CD-ROM que le proporcionaría el Procurador, y haga la “corrida” respectiva para conocer los lazos entre los elementos terroristas de Sendero Luminoso registrados en la DINI, y las personas que firmaron el padrón de la RENIEC. A partir de ahí se tiene que formar el diagrama de vínculos, y en función de la importancia y nivel jerárquico que tenían en dicha red terrorista los liberados, se establezca las relaciones con los que firmaron. Luego se debería proceder a orientar el esfuerzo de búsqueda para ubicar a estas personas y conocer sus recientes actividades y, de seguro, nos llevaríamos una menuda sorpresa. Hay que tener presente que son casi tres mil los liberados durante estos últimos nueve años. No es poca cosa. Menudo trabajo que tendrían, pero sería beneficioso para la Seguridad Nacional.
La Base de Datos de la Dirección de Contrainteligencia, que ahora tiene la DINI, la fui enriqueciendo progresivamente durante toda la década de los 90 con el empadronamiento de todas las personas detenidas por la DINCOTE y sus antecedentes respectivos. Luego, con las que fueron procesadas y quedaron absueltas, y se incluyó a los condenados con un resumen de los hechos por los cuales fueron juzgados. De modo que tendrían un cuadro de situación para iniciar esta operación que podría denominarse con el código “Iluminación”, pues nos daría importantes luces del actual accionar senderista en todo el territorio nacional porque es evidente que estos elementos están en un proceso de renovación doctrinaria, y es previsible que pronto actúen fuera del VRAE y el Huallaga. Entonces, hay que detectarlos a tiempo. Ese debería ser un reto de la DINI. Ojalá así sea, y no nos lamentemos en el futuro por la inacción de este organismo de inteligencia y del Director Ejecutivo.Recapitulando: ¿luego qué sucedió? El presidente Alejandro Toledo Manrique y su primer ministro Luis Solari de la Fuente, como miembros del Poder Ejecutivo, remiten el 7 de enero de 2003 el proyecto de Ley 5154-2002 al Congreso de la República y el día 8 de enero este proyecto de ley, por Acuerdo de la Junta de Portavoces, fue exonerado del trámite de comisiones, y ese mismo día fue aprobado por el pleno del Congreso. Es así que, con fecha 8de enero de 2003, el Congreso da la Ley N° 29713 mediante la cual en su artículo primero se aprueba delegar facultades legislativas al Poder Ejecutivo a fin de legislar en materia de terrorismo y sobre derecho penal material, procesal penal, ejecución penal, y defensa judicial del Estado relacionados con el delito de terrorismo.Por otra parte, en el numeral segundo de dicha ley se señala que “...para los fines a que se refiere el artículo anterior, el Poder Ejecutivo creará una Comisión encargada de elaborar las propuestas correspondientes, a la que se integrarán dos representantes de la Comisión de Justicia del Congreso de la República. Mediante Resolución Suprema refrendada por el ministro de Justicia, se establecerá el número de miembros de la Comisión y su organización interna”.
El 10 de enero de 2003, en la separata de normas legales del diario “El Peruano” se publica la Resolución Suprema N° 001- 2003-JUS, mediante la cual se conforma una comisión ad hoc que será encargada de elaborar propuestas de legislación en materia de terrorismo. Luego aparecen designados con nombre propio, y no por sus funciones o cargos, los doctores César San Martín Castro, Jorge Villegas Ratti y Javier de Belaunde y otras siete personas más, quienes son las responsables de elaborar el nuevo marco jurídico en materia de lucha contra el terrorismo.El 20 de febrero de 2003 el diario oficial “El Peruano” publicó en la separata de normas legales los Decretos Legislativos N° 923, 924, 925, 926 y 927 expedidos por el Poder Ejecutivo durante la administración del presidente Alejandro Toledo Manrique, estando a las facultades delegadas por el Congreso de la República mediante el artículo 1° de la Ley N° 27913, a fin de reemplazar la legislación correspondiente para concordar el régimen jurídico de la cadena perpetua de los delitos regulados por los artículos 2°, 3° inciso b) y c), 4°, 5° y 9° del Decreto Ley N° 25475, de conformidad con lo expuesto en la referida sentencia del Tribunal Constitucional, en cuyas normas se regulan la forma y modo como se tramitarían las peticiones de nuevos procesos y los procesos mismos a que se refiere la citada sentencia, así corno para ordenar la legislación sobre terrorismo que mantiene vigencia.Se debe recordar que al amparo de los Decretos Leyes impugnados los jefes, mandos operativos, cabecillas, dirigentes y principales integrantes de los comandos de aniquilamiento de las redes terroristas de Sendero Luminoso y el MRTA capturados en la década de los 90 fueron investigados por la DINCOTE, y con el atestado policial correspondiente fueron denunciados por los fiscales militares ante la Justicia Militar, la que les abrió proceso penal, y luego del trámite respectivo los condenó a la pena privativa de la libertad de cadena perpetua por el delito de traición a la patria en agravio del Estado.¿A qué se debe esta recordación? Pues a que el Tribunal Constitucional en la sentencia supradicha ha fallado declarando inconstitucional la frase: “O TRAICIÓN A LA PATRIA” del artículo 6° del Decreto Ley N° 25659.Entonces nos preguntamos: ¿Cuál es el fundamento de esta declaración sobre la inconstitucionalidad del tipo penal de traición a la patria? Para responder nos remitiremos al fundamento jurídico N° 36 de la sentencia de marras donde dicho órgano jurisdiccional constitucional ad peddem litterae señala: “El Tribunal Constitucional comparte el criterio sostenido por los demandantes en relación con el tipo penal para el delito de traición a la patria”.Nuevamente nos preguntamos: ¿Quiénes son los demandantes? Respondemos: reitero, ¡ ¡ la red terrorista Sendero Luminoso representada por Marcelino Tineo Silva y otros!! Por tanto, los ilustres señores miembros del Tribunal Constitucional supradicho que conformaron el Pleno Jurisdiccional en el año 2003, al sentenciar compartieron el criterio de los senderistas. ¿Qué les parece? Realmente esto es digno de Franz Kafka.
Al ser declarada inconstitucional la frase “O TRAICIÓN A LA PATRIA”, contenida en el artículo 6 del Decreto Ley N° 25659, fueron declarados nulos todos los procesos penales que con el carácter de cosa juzgada estaban archivados definitivamente ante la Justicia Militar por dicho delito, y se ordenó que los expedientes sean remitidos —en el día— al Fuero Común para que de acuerdo al procedimiento establecido por el Decreto Legislativo N° 926, de oficio se proceda—repito— a las anulaciones de sentencias ejecutoriadas, juicios orales en pleno trámite y de ser el caso declarar la insubsistencia de acusaciones fiscales en los procesos por el delito de terrorismo ante jueces y fiscales con identidad secreta (jueces sin rostro). Igualmente debía procederse a la anulación de los procesos penales por delito de terrorismo en los que se aplicó la prohibición de la recusación prevista en el artículo 13 inciso h) del Decreto Ley N° 25475, declarado inconstitucional en la predicha sentencia del Tribunal Constitucional.Para anular los fallos ejecutoriados, y con carácter de cosa juzgada, no ha importado en absoluto el violar principios y derechos de la función jurisdiccional garantizados por el artículo 139°, inciso 13) de la Constitución Política del Estado, eh que, expresamente, se prohibe revivir procesos penales fenecidos con resolución ejecutoriada, procesos que tienen el carácter de cosa juzgada, como los de la Justicia Militar.Es de público conocimiento que la Sala Nacional de Terrorismo --presidida por el vocal Pablo Talavera Elguera e integrada por los vocales David Loli Bonilla y Victoria Sánchez Espinoza— al tramitar los nuevos procesos penales sólo han condenado —en su fallo dictado el 13 de octubre de 2006— a la pena de cadena perpetua a Manuel Rubén A bimael Guzmán Reinoso y Elena Albertina Iparraguirre Revoredo, esta vez por delito de terrorismo agravado y delitos conexos en agravio del Estado. Y ha sido la Sala Penal de la Corte Suprema de Justicia de la República que en ese proceso penal mediante Ejecutoria Suprema del 14 de diciembre de 2007 ha declarado Haber Nulidad en cuanto al extremo de la pena impuesta a Laura Eugenia Zambrano Padilla y María Guadalupe Pantoja Sánchez, y reformándola les impuso la pena de cadena perpetua, confirmándola en lo demás que contiene.
Entonces, de la red terrorista Sendero Luminoso sólo hay cuatro cabecillas condenados a la pena de cadena perpetua, y de la otra red terrorista, MRTA, ninguno. Qué tal diferencia con la Justicia Militar, que condenó a cadena perpetua a más de un centenar de cuadros terroristas, entre líderes, mandos y comandos operativos de aniquilamiento selectivo. ¿Benevolencia? ¿Justicia? ¿Respeto a los derechos humanos de los terroristas? ¡Qué se yo!Según información oficial brindada por la Defensoría del Pueblo, a partir del año 2001 hasta la actualidad han sido liberados 2 191 internos por el delito de terrorismo, exceptuando a los más de 759 internos que fueron indultados durante los gobiernos de Alberto Fujimori, Valentín Paniagua y Alejandro Toledo, a través de la comisión ad hoc de indultos que presidiera el desaparecido religioso Hubert Lansier y que fuera integrada por el doctor Silva Santisteban, como Defensor del Pueblo, e inicialmente por el doctor Alfredo Quispe Correa en su calidad de ministro de Justicia de Fujimori, que posteriormente fuera sustituido por los ministros respectivos designados durante los gobiernos de Paniagua y Toledo. Entonces tenemos en libertad a 3 000 “combatientes” que están vivos, con un partido intacto, y si las cosas no cambian pueden ser los sepultureros del “Viejo Estado” que conocemos.Con la inteligente y eficaz Ofensiva Legal (OL), que como primer factor de la Guerra Revolucionaria (GR) ha venido desarrollando la red terrorista Sendero Luminoso contra el Estado peruano, se ha producido el efecto deseado por los comandos y planificadores terroristas, pues lograron —utilizando las propias entidades de la superestructura estatal— la libertad de cuadros importantes de su organización, la desarticulación y anulación del marco jurídico duro que con carácter de transitoriedad se implementó para una situación de guerra durante el gobierno del presidente Fujimori con el fin de quitarle la iniciativa al aparato legal senderista denominado Asociación de Abogados Democráticos.Hoy día, Sendero Luminoso tiene toda la iniciativa legal de su parte y el Estado peruano, insólitamente, se mantiene inerme y arrinconado, pues no hace nada para poder recuperarla. Aquí se cumple la frase que alguna vez escuchara de Abimael Guzmán Reinoso cuando conversáramos sobre el tema del Estado. Para Guzmán, el Estado peruano es metafóricamente hablando “un elefante metido dentro de un pantano”, o dicho con mayor ironía “es un elefante metido en una caja de cristal”. En ambos casos el elefante (entiéndase el Estado) no puede moverse. Eso es lo que pasa ahora.
Para Abimael Guzmán Reinoso la frase “los comunistas debemos persistir”, es un aforismo que utiliza Sendero Luminoso; es por eso que no estando contento ante el éxito obtenido con el resultado de su acción de inconstitucionalidad incoada ante el Tribunal Constitucional, haciendo uso de la propia legalidad del Estado que busca destruir, y estando a que con la sentencia del 3 de enero de 2003 quedó agotada la jurisdicción interna y considerándose los senderistas dizque lesionados en los derechos que la Constitución y las leyes (en las que no creen) les reconoce, han recurrido a los tribunales internacionales haciendo uso de esas normas, nada menos. En ese sentido sus representantes legales han accionado contra la sentencia del Tribunal Constitucional ante la Comisión Interamericana de Derechos Humanos con sede en Washington, como paso previo para recurrir a la Corte Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) de San José de Costa Rica, y así redondear el “faenón” terrorista destinado a obtener mayores triunfos legales contra el Estado peruano, que se mantiene en el pantano, o en la caja de cristal, a decir de Guzmán.Pero este “faenón” no quedó ahí. Estaba aún incompleto. Por eso los planificadores terroristas, apoyados por los letrados integrantes de la Asociación de Abogados Democráticos, siguieron impugnando en la jurisdicción interna el sistema legal antisubversivo vigente, difundiendo la observación que formulara la Comisión Interamericana de Derechos Humanos sobre la nueva legislación que en materia de lucha contra el terrorismo había sido expedida el 20 de febrero de 2003 (Decretos Legislativos 921 al 927). Allí se señala que pese a las modificaciones efectuadas por el Estado peruano al promulgar los citados dispositivos legales, esta normatividad aún continúa atentando contra lo establecido en la Convención Americana de Derechos Humanos.En esta misma línea de pensamiento, los planificadores terroristas —bajo el principio de persistencia— una vez más prosiguieron con su objetivo de enervar el marco jurídico vigente. Valiéndose de cinco mil ciudadanos con firmas comprobadas por el Jurado Nacional de Elecciones, al amparo de lo dispuesto en los artículos 200° inciso 4 y 203° inciso 5 de la Constitución Política del Estado y los artículos 98° y siguientes del Código Procesal Constitucional, interpusieron otra acción de inconstitucionalidad contra el artículo 2° del Decreto Ley N° 25475 y los Decretos Legislativos 921 y siguientes.Consideran, fundamentalmente, que el articulo 2° del citado Decreto Ley es una norma inconstitucional, pues dizque viola el artículo 2° inciso 24 literal d) de la Constitución, el principio de la legalidad y tampoco señala el bien jurídico protegido. ¿Por qué? Sostienen que lo desenvuelto en el Perú desde el 17 de mayo de 1980 bajo la dirección del Partido Comunista del Perú es una guerra popular y no terrorismo; los hechos imputados son hechos de una guerra popular y una guerra no puede ser penalizada, no puede ser tipificada como delito, no puede encuadrarse como un elemento del tipo penal previsto en el artículo 2° del Decreto Ley N° 25475 de 5 de mayo de 1992, al que conceptúan como la columna vertebral de la legislación antiterrorista, lo cual demuestra precisamente las bondades y eficacia de la normatividad expedida en la década de los 90 durante el gobierno del presidente Fujimori para combatir a las redes y coaliciones terroristas.Paralelo a ello, el equipo legal o de abogados que confolinan la reconstituida Asociación de Abogados Democráticos (ADD) como un organismo generado por la red Sendero Luminoso, se están dedicando a tiempo completo para conseguir la liberación de la mayor cantidad de cuadros de las “luminosas trincheras de combate” (los penales) con el objetivo de disponer de elementos experimentados del partido que ayuden a la recomposición de la organización, a fin de poder posteriormente reiniciar la lucha armada.
Pareciera que fue en vano la entrega de sus vidas en defensa de la patria de los 103 oficiales, 91 técnicos y suboficiales y 880 soldados, todos ellos del Ejército Peruano fallecidos en la guerra contra las redes terroristas. En vano pareciera el sacrificio de aquellos 23 oficiales, 26 técnicos y suboficiales y 318 soldados, igualmente del Ejército Peruano, quienes han quedado discapacitados a consecuencia de la guerra contra estas organizaciones terroristas. Ello, sin contar a otros miles de policías, de miembros de las Fuerzas Armadas y de ronderos, entre fallecidos y discapacitados. En vano pareciera el terrible sufrimiento que padecen los niños huérfanos, las viudas y los desplazados como consecuencia de la insania terrorista. Ellos y sus familiares hoy sufren el abandono material y moral del Estado y de la sociedad. ¿Quién se acuerda de ellos? ¿Por qué se oculta esa verdad?Simultáneamente a esta siniestra Ofensiva Legal (OL) senderista se observa que a partir de la caída del régimen del presidente Fujimori en noviembre de 2000, la izquierda caviar nativa comienza a desarrollar, cada vez con mayor intensidad y virulencia mediática, otra estrategia que como Ofensiva Legal (OL) es tan o más fina que la de esta red terrorista, pues es más sutil pero no por ello menos perversa y dañina debido a los efectos devastadores que está produciendo, convirtiéndose en aliada táctica (de la primera) ya que se complementan ambas —cual primos hermanos— no sólo en los objetivos buscados sino en los propósitos estratégicos que persiguen sus planificadores y ejecutores rábulas, para debilitar, desestabilizar y finalmente reducir a la mínima expresión a las Fuerzas Armadas, la Policía Nacional y al anémico Sistema de Inteligencia Nacional, sin utilizar la vía violenta, sino al Ministerio Público, al Poder Judicial y al Tribunal Constitucional.En dicha estrategia estarían comprometidos “hombres de leyes” de la izquierda caviar nativa, colectividad que entre otros asuntos monopoliza la supuesta defensa de los derechos humanos a través de las ONGs Instituto de Defensa Legal y Justicia Viva, las que habrían actuado como operadores de la Coordinadora Nacional de Derechos Humanos. Son estas ONG las que organizan los “talleres y seminarios de capacitación” para jueces y fiscales de diversas instancias, y a la vez patrocinan, simultáneamente, la defensa técnica de los procesados o acusados por delitos de terrorismo que estos magistrados iban a investigar y juzgar. Dicho en otras palabras, el Abogado Defensor del acusado le enseña al Fiscal cómo debe formular la acusación, y al Juez cómo debe juzgarlo y sentenciarlo. Es decir, se cierra el círculo pernicioso en agravio de la sociedad... ¡y no pasa nada!!Al pasar de la Justicia Militar al Fuero Común los procesos penales seguidos contra los cabecillas, jefes de comandos de aniquilamiento que son autores materiales de asesinatos selectivos y ataques indiscriminados con el uso de explosivos contra población civil indefensa, ocurrió algo muy singular: se produjeron en el Poder Judicial y en el Ministerio Público cambios sustanciales en la conformación de los tribunales, juzgados y fiscales encargados de volver a procesar nuevamente por el delito de terrorismo a estos integrantes de las redes de Sendero Luminoso y el MRTA.Bajo el pretexto de “adecuación” de la Justicia Civil a los nuevos procesos penales contra los terroristas, que ya habían sido sentenciados a la pena de cadena perpetua por la Justicia Militar, la oligarquía de las ONG derechohumanistas montaron y financiaron los referidos costosos “talleres y seminarios de capacitación” para alienar y acondicionar la mente y el modo de resolver de jueces y fiscales adecuándolos a la filosofía que inspira la CIDH.En estos talleres fueron capacitados los magistrados participantes bajo una línea de pensamiento: el Estado peruano con sus fuerzas armadas y policiales, conjuntamente con los órganos de inteligencia, desplegaron desde el año de 1980 hasta el 2000 una política genocida de violación sistemática de los derechos humanos contra las pobres “víctimas” terroristas, y consecuentemente es bajo esos parámetros ideopolíticos que se debía procesar a los integrantes de las redes terroristas, pues son víctimas del llamado “terrorismo de Estado”.
Mientras que a los militares, policías y miembros de los servicios de inteligencia, por pertenecer a instituciones que son “genocidas” se les debería incriminar bajo el criterio doctrinario, valga la redundancia, pues ejecutaron una política institucional y sistemática de violación de derechos humanos, y por tanto tendrían que ser juzgados y condenados drásticamente, según la ignara teoría y concepto de la “Cadena de Mando” que han ideado nada menos para poder procesarlos por la comisión de “delitos de lesa humanidad”. La meta de los abogados de la izquierda caviar nativa ha sido invertir maquiavélicamente la realidad a través de trastocar la verdad con el claro propósito de darle a las redes terroristas la imagen de ser unas “víctimas” del gobierno “genocida” de Fujimori. Esto opera, claramente, a manera de una vendetta porque fue el régimen fujimorista el que redujo al terrorismo a su mínima expresión; por tanto, en represalia, había que estructurar una venganza política contra ese régimen.Las consecuencias tangibles de esta sutil estrategia diseñada e implementada por el aparato jurídico de la izquierda caviar nativa, se ha visto reflejada cuando en cumplimiento de esos parámetros ideopolíticos fijados en los “talleres y seminarios de capacitación”se ablandaron las acusaciones contra los integrantes de las redes terroristas de Sendero Luminoso y del MRTA, y lo propio sucedió con las, sentencias. Aquí ha funcionado la ley del embudo: lo ancho para los integrantes de las redes terroristas y lo angosto para los militares, policías y miembros de inteligencia. ¡Así aplican la ley penal en la tramitación de estos procesos!Otra de las tácticas que utilizan los caviares, es propiciar por órdenes de sus patrocinadores las pasantías, seminarios y años sabáticos en España para que asistan jueces y fiscales peruanos, a fin de impregnarlos con la línea de pensamiento que promueve la izquierda caviar peninsular, que es ducha en diseñar “doctrinas jurídicas” de claro contenido político para ideologizar a los participantes con esa corriente de pensamiento que les sirva de andamiaje conceptual, y a su vez de sustento en la formulación de denuncias y en la emisión de resoluciones judiciales.El modelo estratégico que ha venido utilizando eficazmente la izquierda caviar nativa durante estos casi últimos nueve años para debilitar y desestabilizar a las Fuerzas Armadas, a la Policía Nacional y particularmente al Sistema de Inteligencia Nacional, ha tenido su máxima expresión en la sentencia que el 7 de abril de 2009 expidiera la Sala Penal Especial de la Corte Suprema de Justicia de la República contra el presidente Alberto Fujimori Fujimori, sentencia que lo condena a la drástica pena de 25 años de prisión dizque como autor mediato de homicidio calificado por los casos de Barrios Altos y de La Cantuta y por secuestro agravado en presunto agravio de Samuel Dyer Ampudia y otro.Con relación a dicha sentencia condenatoria el jurista Enrique Ghersi en una entrevista brindada al diario Correo, y que fuera publicada en la página 12 el día 14 de abril de 2009, señala que esa sentencia al presidente Fujimori no tiene una factura y solidez intachable, pues: “Es una sentencia ideológica que no se basa en hechos sino en argumentos”. Para dicho letrado el ingeniero Fujimori “...ha caído en manos de sus enemigos ideológicos, de manera que todo el proceso en su contra es en realidad político y no sólo jurídico”.Pero esta estrategia no se ha detenido con el “triunfo” de la condena al presidente Fujimori, pues continúa cada vez con mayor persistencia y ha llegado al extremo inaudito de formularse acusación contra un gran soldado, el general EP Clemente Noel y Moral. Pese a que es de público conocimiento que éste ha fallecido víctima del cáncer, cuando se encontraba en la clandestinidad, se ha ignorado este hecho y se ha subrayado que se encontraba con orden de captura por presuntas violaciones a los derechos humanos en Ayacucho, durante su comando en 1983.
Su sucesor, el general EP Adrián Huamán Centeno, un hombre de casi 80 años, también está procesado. Otro de sus sucesores, el general EP Wilfredo Morí Orzo, ha corrido igual suerte, y así sucesivamente podría seguir, pues todos los señores generales del Ejército que desempeñaron el Comando Político y Militar en Ayacucho durante la década de los 80, están procesados por presuntas violaciones a los derechos humanos, en el marco de una persecución implacable y de inocultable cariz ideológico.Esta estrategia se ha visto reflejada, además, en las sentencias que ya han emitido diversos órganos jurisdiccionales contra personal de las Fuerzas Armadas y contra miembros del Sistema de Inteligencia Nacional por delito de asesinato y secuestro agravado como autores mediatos y materiales de esos hechos que se consideran como de lesa humanidad, y en las que la magistratura utiliza abundantes citas de juristas españoles y glosas de sus líneas de pensamiento doctrinarias para sustentar la parte considerativa de los fallos judiciales.
En el Perú no existe, ni por asomo, una estrategia de guerrapolítica contra las redes terroristas para reforzar el sistema democrático a fin de hacer frente a la llamada Guerra Política (GP) mediática que como segundo factor de la ecuación viene desarrollando Sendero Luminoso. Esta GP senderista está acompañada con la que a su vez desarrolla paralelamente la izquierda caviar nativa. Las dos aprovechan ese vacío del Estado. Ambas están orientadas a minar el valor, la moral y la capacidad combativa de las fuerzas del orden y de los aparatos de inteligencia y complementan la Ofensiva Legal (OL).En efecto, dicha red terrorista se vale de la ejecución de esporádicas, espectaculares y letales acciones para obtener gran repercusión en los medios y “demostrar” así ante la opinión pública la incapacidad de las fuerzas militares y policiales y la inoperatividad de los órganos de inteligencia del Estado. En tanto, la estrategia caviar, un poco más “refinada” y sutil, se vale de las denuncias, investigaciones fiscales y de los largos procesos judiciales –que promueve– contra militares, policías y miembros del Sistema de Inteligencia Nacional por delitos de lesa humanidad, para desestabilizar a las fuerzas del orden y a los órganos de inteligencia, no sólo accionando dichas articulaciones, sino integrándola con una campaña mediática a través de medios afines, a sabiendas que el Perú tiene un grave problema de Seguridad Nacional en el frente externo con Chile.En cuanto a la acción de los Organismos de Fachada (AOF) de Sendero Luminoso, como tercer componente paralelo y complementario a la Ofensiva Legal (OL) y a la Guerra Política (GP) de la ecuación de Guerra Revolucionaria (GR), este factor es absolutamente visible debido al intenso trabajo político de base que vienen llevando a cabo con todos sus “Organismos Generados” a fin de incrementar exponencialmente su presencia en la zona Este de Lima, en las universidades y sindicatos y en las distintas asociaciones de provincianos residentes en la capital y en el seno del magisterio, con la proliferación de las escuelas populares y la difusión de contenidos violentistas antiEstado que vienen impartiendo. Esta estrategia se hace cada vez más visible en las diversas movilizaciones violentas que se dan en el país con mayor frecuencia, las mismas que se caracterizan por una neoviolencia masiva, irracional, visible y diversificada como es el caso de los cruentos sucesos de Tacna, Moquegua y Bagua. Sin embargo, desde el Estado no se entiende que estamos ante un problema político-social y no puramente militar o policial.Ahora bien, ¿cuál ha sido la reacción del Estado peruano frente a este nuevo esquema de desarrollo de la Guerra Revolucionaria (GR) por la red terrorista Sendero Luminoso durante estos nueve primeros años del siglo XXI?Durante el gobierno de transición del presidente Valentín Paniagua Corazao, del régimen presidido por el doctor Alejandro Toledo Manrique y en lo que va del gobierno presidido por el doctor Alan García Pérez, erróneamente se ha privilegiado –y se sigue haciendo hasta la actualidad– el cuarto factor de la ecuación; esto es, enfrentando militarmente de manera prioritaria y exclusiva a lo que es accesorio, es decir, a las Acciones Terroristas y Guerrilleras (ATG) senderistas, que por ahora sólo son esporádicas y están focalizadas en dos áreas geográficas del país. Estos tres gobiernos han dejado de lado –de manera incomprensible– los otros tres factores principales de la ecuación: la Ofensiva Legal (OL), la Guerra Política (GP) y la Acción de los Órganos de Fachada (AOF), que hábilmente viene ejecutando Sendero Luminoso, enfatizo, prioritariamente. Esto, sin percatarse que al desarrollar a nivel nacional la Guerra Revolucionaria (GR) contra el Estado peruano, el senderismo coloca por ahora en un segundo plano las Acciones Terroristas y Guerrilleras (ATG).Frente a este modelo de Guerra Revolucionaria (GR), el Estado, repetimos, únicamente responde militarmente en el Huallaga y en el VRAE, olvidándose del resto del territorio nacional, particularmente de la capital de la República, lugar donde esta red terrorista viene logrando clandestinamente un importante nivel de recomposición no militar de la organización. El privilegiar exclusivamente el factor militar de la lucha, en vez de derrotar políticamente a Sendero Luminoso, lo fortalece a éste, posibilita que ese enemigo interno se renueve doctrinariamente y, además, se envalentone por la debilidad del Estado y traiga en un futuro cercano más muerte y destrucción al país.Dicho esto, veamos cómo el día 15 de enero de 2009 el diario oficial El Peruano publicó en la separata de normas legales el Decreto Supremo N° 001-2009-DE/EP mediante el cual se crea como un Órgano de Línea del Ejército Peruano, asignado a una zona del territorio nacional, la Región Militar del Valle de los Ríos Apurímac y Ene (VRAE) hasta el logro de la pacificación; es decir, para realizar en su ámbito de competencia la finalidad primordial que tiene constitucionalmente el Ejército como parte del componente terrestre y además participar en la Defensa Civil y en los estados de excepción.
Esta Región Militar VRAE (RMV) tiene como ámbito territorial los departamentos de Cerro de Paseo, de Junín (a excepción de las localidades de Colonia, Rateri, Shiriatari, Alegre, Misión, Ivotsoteni, Núñez, Pedro López, Montes y Poveni del distrito de Río Tambo de la Provincia de Satipo y el distrito de San Román de la provincia de Chanchamayo), de Huancavelica, de Ayacucho, y los distritos de Pichari y Kimbiri de la provincia de La Convención del departamento de Cusco.Son evidentes los antecedentes burocráticos en la dación de dicho dispositivo legal, que nos permiten ver la lentitud con que actúa el Estado en la lucha contra las redes terroristas, pues estos se remontan al año 2006. En el Consejo de Ministros del 20 de diciembre de dicho año se aprueba el esquema de intervención estratégica integral denominado Plan VRAE. Es recién mediante Decreto Supremo N° 003-2007-DE del 22 de febrero de 2007 que el Gobierno declara de necesidad pública, y preferente interés nacional, oficializar el esquema denominado “Una opción de Paz y Desarrollo en Seguridad para el Valle de los Ríos Apurímac y Ene - Plan VRAE” teniendo como objetivo alcanzar la pacificación, combatir el narcotráfico y otros elementos, así como la promoción del desarrollo económico y social del valle.Para ello, el Comando Conjunto de las Fuerzas Armadas crea el Comando Especial VRAE (CE-VRAE) con Resolución Ministerial N° 277-2008-DE/CCFFAA del 13 de marzo de 2008, como un elemento operativo, el mismo que no tuvo una correlación administrativa por parte de la institución Ejército. En todo el territorio de este Comando Especial hay 6 mil hombres de las fuerzas combinadas, y en el territorio declarado zona de emergencia, hay 2 372 efectivos según declaraciones públicas efectuadas por el general Francisco Contreras Rivas, jefe del Comando Conjunto de las Fuerzas Armadas el 15 de abril de 2009. Por su parte, la Policía Nacional del Perú ha creado el Frente Policial VRAE (FPVRAE) que agrupa 27 comisarías de los departamentos de Ayacucho, Cusco, Junín y Huancavelica con un total de 1 316 efectivos con sus Bases de Operaciones Especiales y Antidrogas.Entre todas estas fuerzas militares y policiales no existe la unidad de comando en la lucha contra las redes terroristas. Esa es otra falla de la estrategia, tanto más que la Policía no tiene la logística adecuada para enfrentar los conflictos asimétricos, y en las zonas de emergencia no recibe ni está bajo las órdenes operativas del Comando Conjunto de las Fuerzas Armadas, a fin de que pueda actuar de manera coordinada. Para planificar operaciones contraterroristas asimétricas de la magnitud requerida es indispensable contar con eficaces coordinaciones administrativas. Se requiere unidad de dirección de mando y comando.Es por eso que nueve meses y medio después, cuando se dan cuenta de la complejidad de la zona, la naturaleza de las operaciones, y particularmente de la necesidad que tiene el Comando Conjunto de optimizar el Comando y Control así como el apoyo administrativo, se crea la Región Militar VRAE (15 de enero de 2009). ¿Descuido? ¿Improvisación'? ¿Negligencia? ¿Mal planeamiento?Mediante la citada Resolución Ministerial de marzo de 2008, el Comando Conjunto de las Fuerzas Armadas procede a la total reestructuración de su Estado Mayor Conjunto, a la creación de la Escuela Superior de las Fuerzas Armadas, a la configuración de los nuevos órganos de línea para iniciar la intensificación de las operaciones militares en el VRAE con el Comando Especial VRAE. De acuerdo a ello la nueva estructura del Estado Mayor Conjunto (DIEMCFFAA) quedó conformada por ocho divisiones del Estado Mayor Conjunto y que son: la primera (ID), Personal; la segunda (2D) Inteligencia; la tercera (3D) Operaciones; la cuarta (4D) Logística; la quinta (5D) Planes y Política; la sexta (6D) Comando Control y Comunicaciones; la séptima (7D) Preparación y Evaluación de las Fuerzas, y la octava (8D) Operaciones de Información. Estas dos últimas recién creadas con dicho dispositivo legal.Como órganos de línea tenemos los Comandos Operacionales y los Comandos Especiales. De los primeros tenemos el Comando Operacional Marítimo (COMA); el Comando Operacional del SUR (COS); el Comando Operacional de la Amazonía (COAM); el Comando Operacional del Centro (COC); el Comando Operacional del Norte (CON); el Comando Operacional Aéreo (COA) y elComando Operacional de Defensa Aérea (CODA). En cuanto a los segundos, tenemos el Comando Especial del Valle del Río Apurímac - ENE (VRAE) –ya citado–, el Comando Especial de Reservas Generales (CERRGG) y el Comando Especial Ucayali (CEU).Se debe destacar, como un paso muy positivo, la creación desde el 28 de diciembre de 2007 e inicio en el año 2008, de las actividades académicas anuales de la primera promoción de 162 oficiales alumnos del Primer Curso de Comando y Estado Mayor de la Escuela Superior de las Fuerzas Armadas (ESFFAA) que se ha convertido en el más importante Centro de Instrucción Superior altamente calificado de los oficiales superiores del Ejército Peruano, la Marina de Guerra del Perú y la Fuerza Aérea del Perú, los que después de doce meses de estudios lograron egresar de la Escuela.La ESFFAA busca como objetivo perfeccionar la preparación de los oficiales superiores alumnos en aquellas doctrinas conjuntas y especificas, fomentando el accionar en equipos conjuntos de manera permanente con el propósito de prepararlos en la concepción. planeamiento y conducción de las operaciones y acciones militares hasta el nivel operacional, así como administrar de manera adecuada los recursos de las Fuerzas Armadas.Durante el 2009 la ESFFAA está conduciendo el Segundo Curso de Comando y Estado Mayor teniendo como director al capitán de navío Juan Polo Word, quien desde la creación de dicha Escuela viene ejerciendo ese empleo bajo el reto de crear conciencia entre los oficiales alumnos del Ejército, Marina y Fuerza Aérea en el sentido de que el trabajo en equipo es lo más importante. Ello sólo se puede lograr con la integración interinstitucional a partir de ese nivel jerárquico castrense, a fin de homogenizarse para asegurar la interoperabilidad como un solo accionar conjunto.En este curso se deja de lado el aspecto táctico y operacional en los respectivos teatros de guerra para ingresar al ámbito operacional-estratégico, estimulando el pensamiento y la creatividad de los participantes mediante la ejecución de juegos de guerra y de ejercicios de carácter conjunto. Es un gran paso en la formaciónacadémica y profesional de las nuevas generaciones de oficiales y constituye un hito que marcará la nueva línea de pensamiento en las Fuerzas Armadas en materia de seguridad, política y estrategia en el siglo XXI.De acuerdo a la nueva estructura organizacional y operativa, el Comando Conjunto de las Fuerzas Armadas —en el marco de la Ley Orgánica del Ministerio de Defensa— tiene ahora la responsabilidad de planear, comandar, conducir y supervisar las operaciones militares conjuntas en el frente externo e interno, las que son ejecutadas por sus elementos de maniobra, organizados en los Comandos Operacionales y Especiales. Estas tareas se deben realizar en estrecha coordinación con las respectivas Instituciones Armadas, las cuales deben preparar y equipar a las unidades y al personal, así como brindar el soporte logístico necesario a dichos comandos, a fin de posibilitar su eficiente empleo operacional en el teatro de guerra respectivo.Esta estructura organizacional y operativa de las Fuerzas Armadas es la correcta y adecuada para cumplir con la finalidad primordial de garantizar la independencia, la soberanía y la integridad territorial de la República, vale decir para una posible guerra simétrica entre Estados, en que se confronte los potenciales militares de cada país. Para esa clase de guerra que corresponde a la Guerra de Tercera Generación (3GW), la Seguridad Nacional reposa en la eficaz cooperación y la interoperabilidad que puedan alcanzar las respectivas instituciones armadas para la ejecución de operaciones militares conjuntas.Sin embargo, para atender la problemática que se viene presentando en el frente interno tenemos que previamente saber y comprender que estamos ante otro tipo de guerra, totalmente diferente a la simétrica entre Estados. Las Fuerzas Armadas no se enfrentan a otro ejército regular, sino que tienen que hacerlo contra otra clase de entidades. Se sigue olvidando lo más importante: que la red terrorista Sendero Luminoso, insisto, era, es y seguirá siendo, como enemigo, un actor no estatal interno predominantemente clandestino y asimétrico, motivado ideológicamente, que viene operando en estrecha alianza táctica con las redes del narcotráfico y formando coaliciones que coordinan entre sí sus acciones contra un enemigo común, el Estado peruano.Ya hemos explicado que estos actores no estatales a los que referimos, utilizan diversos factores como el engaño, la sorpresa, la velocidad, el movimiento, el empleo de armas, de forma inesperada para alterar sustancialmente el escenario del enfrentamiento rompiendo todos los paradigmas y principios de la guerra. Es en este escenario que el Estado debe enfrentar a toda una conjunción estratégica de actores asimétricos en que no hay frente de batalla definido, pues el campo de batalla es el conjunto de la sociedad y en él no se distingue lo civil de lo militar ni la paz de la guerra.
Frente a estas manifestaciones doctrinarias y operativas que vienen adoptando dichos actores internos no estatales —no me cansaré de repetirlo— que son predominantemente clandestinos y asimétricos, con motivación ideológica, y según hemos visto operan en alianza con redes del narcotráfico, las preguntas válidas son: ¿La actual estructura organizacional y operativa simétrica del Comando Conjunto de las Fuerzas Armadas de tener como un Órgano de Línea —igualmente simétrico-- al Comando Especial VRAE circunscribiendo el escenario del conflicto a una determinada área geográfica del país es la adecuada? La respuesta es ¡NO! ¿La red terrorista Sendero Luminoso sólo está presente en el VRAE? Obviamente la respuesta es negativa, pues está presente en todo el territorio nacional. ¿La Región Militar VRAE (RMV) está organizada para enfrentar una guerra asimétrica? No lo está. ¿Existe unidad de comando en la lucha contraterrorista? No existe.Se persiste en cometer los mismos errores que durante la década de los 80, pues todavía la mentalidad militar prevaleciente es propia de Guerra de Tercera Generación (3GW) y eso la impele a emplear fuerzas simétricas para enfrentarse con actores asimétricos. Es decir, no se ha producido el tránsito hacia una perspectiva adecuada a una estrategia de Guerra de Cuarta Generación (4GW), ni menos se ha diseñado la doctrina, por aplicar para esta clase de guerras lo cual vislumbra en el futuro reveses operacionales que se traducirán como siempre en lamentables “papelones” institucionales. De ahí el fracaso, pues prima, una vez más, la deformación profesional frente a estas nuevas corrientes o tendencias doctrinarias que deberían ser materia de estudio y análisis en la Escuela Superior de las Fuerzas Armadas y en los diversos Estados Mayores, así como en la Comunidad de Inteligencia.Para entender cabalmente el accionar de Sendero Luminoso en el siglo XXI, debemos recordar que antes de iniciar dicha red terrorista el denominado ILA-80,Abimael Guzmán Reinoso estudió y analizó previamente los errores organizacionales, las tácticas empleadas en sus operaciones, las medidas de seguridad, así como las actividades de inteligencia que desarrolló en 1965 el Movimiento de Izquierda Revolucionaria (MIR) cuando insurgió contra el Estado peruano estableciendo tres focos guerrilleros: Cerro Negro (Ayabaca), Púcuta (sierra central) y Mesa Pelada (Cusco). Asimismo, analizó minuciosamente la doctrina combativa que las Fuerzas Armadas aplicaron para derrotar dicho movimiento guerrillero en seis meses. Con el conocimiento de estos dos elementos, en mayo de 1980 nos dio una sorpresa estratégica, de la que el Estado peruano no pudo reponerse en la década de los 80.Con la implementación de la nueva estrategia aplicada por el gobierno de Alberto Fujimori en la década de los 90, particularmente con el marco jurídico de gran dureza que se implementó, el impacto de estas medidas sobre dicha red terrorista fue enorme, pues el Estado peruano, luego de un lapso de 10 años, recién recuperó la iniciativa en el desarrollo de la guerra. La posterior caída de Guzmán y los principales cuadros por el fino trabajo de la DINCOTE significaron otro duro golpe a Sendero Luminoso. Pero la pacificación nacional no concluía con esas capturas, pues recién empezaba a pergeñarse en ese momento.Sólo logrando la capitulación de Abimael Guzmán Reinoso y de Elena Albertina Iparraguirre Revoredo y posteriormente la división o escisión de esta red terrorista que produjo la ruptura orgánica en dos bloques antagónicos entre sí, es que se podía garantizar que una estrategia bien conducida nos llevaría a la pacificación nacional definitiva en el país. Lamentablemente, el desarrollo de ese proceso se truncó en el año 2000 con la caída del presidente Fujimori.
Si bien es cierto que la capitulación y la división produjo un cisma ideológico al interior de Sendero Luminoso, que luego generó un colapso en su estructura organizacional, operativa y doctrinaria reduciendo ostensiblemente su beligerancia y los niveles de amenaza contra el Estado peruano, sin embargo no desapareció del escenario nacional, porque ya desde el inicio de los años 90 era una suerte de virus ideológico inmerso en el tejido social. Luego, como producto de la estrategia integral desarrollada durante los 10 años de gobierno del presidente Fujimori, este “virus” ingresó en un proceso de hibernación estratégica en el dominio militar, orientando todos sus esfuerzos en la reconstitución de la organización, en el desarrollo de sus operaciones y en la doctrina partidaria, poniendo un mayor énfasis es los aspectos políticos. Empezó así un proceso de mutación lento y progresivo, con proyección futura que hoy, conscientes de ello, es urgente frenar y destruir.En este contexto, Guzmán pese a su capitulación y a la división de la red terrorista que él lideraba, entendió –según pude observar directamente durante las conversaciones que sostuviéramos— el alcance de las consecuencias que producirían estos dos sucesos en su organización. Por eso me di cuenta que se concentró en tratar de salvar la jefatura, los principios, la ideología y la memoria de la guerra popular, manejando el repliegue general político y militar para impedir fundamentalmente la destrucción del partido, de modo de seguir más adelante la lucha, cuando se dieran mejores condiciones. Tan consciente era Guzmán de su apuesta que decidió correr el riesgo de que incluso pudieran hasta expulsarlo o aplicársele la sanción máxima que correspondía para estos casos.El criterio utilizado por Guzmán es que bastaría que sólo un 10% del total de la red terrorista aceptara su planteamiento para salvar su organización. A ese 10%, él lo llamó “los más firmes y probados comunistas”. Y pienso, ahora, en lo que alguna vez me dijera: “los comunistas somos águilas porque vemos lejos, nos remontamos al futuro y sacamos del presente toda la fuerza suficiente para seguir desarrollándonos”.Hoy nos encontramos con la cruda realidad, monda y lironda, de que Sendero Luminoso, a partir del gobierno de transición deldoctor Paniagua, pasando por el del doctor Toledo hasta lo que va del régimen aprista del doctor García, se nos viene presentando un modelo de Guerra Revolucionaria (GR) que ha invertido —de acuerdo al nuevo esquema estratégico de “pasar de tiempos de guerra a tiempos de paz”— el orden de los componentes de la ecuación, según hemos visto detalladamente párrafos ut supra, pues se encuentra inmerso en un proceso de reconstrucción y recomposición del partido con el objetivo de reiniciar la lucha armada, cuando menos lo pensemos.¿Con qué elementos podrían hacerlo? Ya se ha señalado que estando al mérito de la Ofensiva Legal (OL) senderista tienen a 3 000 efectivos en libertad. A ello se debería agregar las 8 226 personas (7 224 de Sendero Luminoso y 1 002 del Movimiento Revolucionario Túpac Amaru) que se acogieron a los beneficios de la Ley de Arrepentimiento luego de confesar que eran probadamente senderistas, y es sólo por el derecho penal premial que el Estado perdonó sus delitos a cambio de brindar información.Entonces estaríamos hablando de 10 224 (3 000 + 7 224) efectivos, y si pensarnos en términos completamente conservadores reduciremos ello al 25% (a la cuarta parte) quedando 2 556 efectivos, los cuales serían —a ojo de buen cubero como se dice en el argot popular— probablemente los cuadros con que contaría esta red terrorista a nivel nacional a fin de estar en condiciones de actuar. ¿Cuándo? Muy pronto lo sabremos.Por eso insistimos que focalizar y encapsular el problema del terrorismo al área geográfica del VRAE y el Huallaga y presentar a los terroristas como sicarios del narcotráfico, es un error inexcusable. Por un lado se confunde al enemigo por un análisis incorrecto, o posiblemente por razones políticas, para buscar una justificación frente a los fracasos. Pero además, repito, se olvida que el senderismo está diseminado en todo el Perú, tanto más que nos vienen engañando dolosamente con la ejecución sistemática de esporádicos ataques letales y espectaculares en dichas zonas precisamente para que el Estado enfoque y fije toda su atención —tal como viene sucediendo— reduciendo únicamente a esos dos ámbitos geográficos la amenaza y descuidando, miopemente, el.resto del territorio nacional donde están actuando políticamente los Organismos Generados senderistas. Las redes del narcotráfico que operan en el VRAE constituyen un peligroso enemigo a la Seguridad Nacional, pero de otra naturaleza, que hay que combatir frontalmente con todos los recursos del Potencial Nacional para tratar de erradicarlo drásticamente de esa área geográfica, que es una de las más importantes zonas donde se produce droga en el Perú.
Es hora de reaccionar y actuar políticamente para hacer frente a esta peligrosa amenaza que nuevamente se cierne sobre el país. ¿Cómo? Retomando la abandonada estrategia de seguimiento de los principales mandos, cabecillas y comandos de operaciones de aniquilamiento que han dejado las cárceles, y de aquellos “arrepentidos” que tuvieron un mayor grado de conocimiento del accionar de esta red terrorista; todo ello con el claro objetivo de detectar la lucha ideológica que libran al interior de las universidades, en el magisterio y en los asentamientos humanos donde su presencia política es permanente, particularmente en zonas marginadas y pauperizadas de extrema pobreza.Por ello resultan incorrectos aquellos análisis y diagnósticos que reducen la amenaza de la red terrorista Sendero Luminoso —que opera tanto en el VRAE como en el Huallaga— a un fenómeno de sicariato del narcotráfico. Eso es muy peligroso porque se le está subestimando. Desaparecer o minimizar el factor político es un error de consecuencias imprevisibles, ya que se desconoce lo que es la Guerra Política (GP), que como uno de los componentes de la ecuación de Guerra Revolucionaria (GR) desarrolla con absoluta libertad el senderismo en todo el país ante la indiferencia y en las narices del propio Estado. No hay que seguir cayendo en el engaño estratégico del cual somos objeto. Sendero Luminoso tiene un claro componente político. ¡No debemos olvidarlo! Hay que tener mucho cuidado en no confundir al enemigo.Este enfoque reduccionista equivocado que caracteriza a autoridades políticas y militares, a sectores de la prensa, tiene una lógica consecuencia en el dominio militar, porque ahora las fuerzas del orden tendrán que competir de igual a igual con la red terrorista Sendero Luminoso que ya no desarrolla el esquema de matar ni asolar pueblos como en el siglo pasado. Todo lo contrario: se ha convertido en un excelente cliente que se caracteriza por dar movimiento a la economía local utilizando un discurso político con nuevos contenidos, a lo que se debe agregar las pintas que hace, los volantes que deja hablándole al pueblo de la necesidad de desarrollar la guerra popular, de enfrentarse y luchar contra el Estado.En ese orden de ideas, Sendero Luminoso tiene una naturaleza y finalidad distinta del narcotráfico. Si bien es verdad que su principal financiamiento viene del tráfico ilícito de drogas, no por eso se le debe reducir a traficantes o sirvientes del tráfico ilícito de drogas. Por ello en sus documentos deslindan con respecto a las relaciones que mantienen estratégicamente con las redes del narcotráfico —con las cuales ha formado coaliciones— señalando que ese hecho no cambia en absoluto la naturaleza política de su organización, pues para ellos desde la década de los 80 esta ilícita actividad, hasta la actualidad, ha sido, es y será una fuente de financiamiento que les genera beneficios económicos por brindarle seguridad, lo que les ha permitido siempre potenciar su presencia y capacidad operacional avanzando lógicamente en el desarrollo de sus planes, a fin de alcanzar sin límite de tiempo los objetivos políticos buscados. Es por eso que se requiere políticas claramente diferenciadas para cada caso.Consecuentemente, no es cierto que las acciones terroristas que se practica en el VRAE bajo el liderazgo de Víctor Quispe Palomino (a) “José” y Leonardo Zúñiga Huamán (a) “Alipio”, correspondientes al Comité Regional Principal del Centro, las que realiza José Flores León (a) “Artemio” en la zona del Huallaga correspondientes al Comité Regional del Huallaga, y las que se dan en otros lugares del país, son protagonizadas por sicarios del narcotráfico. No son sicarios del narcotráfico los actores de la violencia en el VRAE y el Huallaga. ¡Que eso quede claro! Son aliados tácticos con diferentes móviles y propósitos estratégicos. Para el narcotráfico el móvil es el lucro. Para Sendero Luminoso el móvil es político, pues tiene como objetivo destruir el viejo Estado e implantar el comunismo en el país, so pretexto de “transformar la sociedad peruana” dizque en beneficio del pueblo. Es por eso que ambos fenómenos son lasdos caras de la misma moneda que hay que combatirlas con un esquema estratégico integral y no aisladamente o minimizando uno para enfrentar al otro. Si confundimos al enemigo, perderemos la guerra y, lamentablemente, se está confundiendo al enemigo.¿Por qué razones Sendero Luminoso está por ahora focalizado en el Valle de los Ríos Apurímac y Ene (VRAE)? Ello obedece clara e ineluctablemente a la exigua y débil —por no decir inexistente—presencia de las diversas instituciones del Estado, cuya ausencia o poca presencia en esos lugares del país de gran incidencia cocalera, no ha brindado un servicio básico esencial como es la protección y seguridad, ni menos los servicios de salud, educación y vivienda, todo lo cual ha generado un vacío político administrativo, que ha sido ocupado por actores no estatales internos: Estos son los que verdaderamente regulan las actividades en la zona en función de sus particulares objetivos, determinando la convivencia y el régimen de vida de las comunidades existentes en esas áreas geográficas que han sido dejadas de lado por un Estado centralista e imprevisor que hace muy poco para revertir esa clamorosa situación.
A ello obedece el porqué ha avanzado tanto Sendero Luminoso en dicho ámbito geográfico. Ha avanzado debido en gran parte a que ha sido más eficiente que su enemigo, el Estado peruano, al cual trata de destruir apuntando a la eliminación del débil y único vínculo que existe entre las comunidades y la estructura estatal: los gobiernos locales.La figura de los “Comisionados por la Paz” que fuera creada por el Estado para coordinar una estrategia que posibilite articular y desarrollar en el VRAE, yen el Huallaga, la acción conjunta de todos los sectores de la administración pública destinada a hacer tangible la presencia de la autoridad estatal a fin de llenar los vacíos político administrativos con el objetivo de ganar la adhesión de la población, ha devenido en ineficaz. Y a tal punto lo ha sido, que nadie conoce cuál es el rol que cumple en el Huallaga el comisionado Víctor Raúl Ramírez. En cuanto al que fuera “responsable político” de ejecutar el Plan VRAE, el sociólogo Jorge Durand Pardo, igualmente no ha podido liderar, y menos gerenciar, dicho plan. Sobre el particular, cabe señalar que a fines de mayo de 2009 el entonces primer ministro Yehude Simon Munaro, a nombre del gobierno aprista, expuso ante el Congreso de la República el documento denominado “Desarrollo y seguridad en el VRAE: una causa nacional”, para afrontar dicha problemática.Considerando los diversos cuestionamientos sobre las deficiencias que existe en la ejecución del Plan VRAE, el gobierno salió al frente emitiendo el Decreto Supremo N° 020-2009-DE, su fecha 12 de agosto de 2009, que fuera publicado en la separata de normas legales del diario El Peruano el día 13 de agosto de 2009, mediante el cual modifica los artículos 7° y 8° del Decreto Supremo N° 003-2007-DE que declara de necesidad pública, y preferente interés -nacional, el esquema de intervención estratégica integral denominado “Una opción de Paz y Desarrollo en Seguridad para el Valle de los Ríos Apurímac y Ene - Plan VRAE”. Con él se ha suprimido de la estructura del VRAE al “responsable político”, siendo sustituido por el secretario del plan VRAE.Con dicho dispositivo legal el plan VRAE y la secretaría ejecutiva han sido trasladados del Ministerio de Defensa al ámbito de la Presidencia del Consejo de Ministros (PCM). Allí dicha secretaría tendrá, entre otras funciones, articular y apoyar las iniciativas de los integrantes del Grupo de Trabajo Multisectorial, y elaborar propuestas de manera concertada y coordinada con los actores regionales y locales, seguir y monitorear los acuerdos que adopte dicho grupo. Igualmente, también se encargará de coordinar con las autoridades regionales y municipales la implementación de núcleos ejecutores en estas zonas afectadas por la perversa unión de terrorismo y narcotráfico.
El ingeniero agrónomo Hernán Valer Carpio, con fecha 14 de agosto de 2009 fue designado titular de la secretaría ejecutiva del “Grupo de Trabajo Multisectorial VRAE”, y de acuerdo a dicho dispositivo legal será el articulador de los programas de desarrollo que se implementan en esa zona del país con la finalidad de afianzar la presencia del Estado y promover el desarrollo. Ese objetivo incluye acelerar las inversiones del Estado y hacer una labor social que responda a las necesidades de la población.Esta secretaría ejecutiva a cargo del ingeniero Valer se encuentra adscrita a la secretaría de coordinación de la Presidencia del Consejo de Ministros y tendrá su sede en la misma zona del VRAE; la misma se financia con cargo del presupuesto institucional de la PCM. Hay que señalar que la PCM tiene adscritos a ella 16 organismos públicos e infinidad de comisiones, con lo cual se le recargan sus ya abultadas labores. Pero lo positivo es que dicha secretaría ejecutiva sí tendrá un mayor nivel de autoridad que cuando estaba encuadrada en el Ministerio de Defensa. Con esa facultad podrá exigir la ejecución de los presupuestos asignados al VRAE para la realización de obras de infraestructura y apoyo social a todas las entidades del sector público, gobiernos regionales y locales.
Si bien este Plan VRAE tiene obvios defectos, significa por lo menos la intención de retomar la presencia del Estado en la zona. Hay que fortalecerlo y desarrollarlo, pues ha sido un grave error del Estado haberse retirado por las amenazas cocaleras. Si no se hubiese dado tal abandono, el VRAE sería hoy un polo de desarrollo, como lo es San Martín. Pero no es tarde. El Plan VRAE es una oportunidad para resolver a tiempo un grave problema y evitarle al Perú mayores costos sociales y económicos de enorme magnitud en el mediano y largo plazo, pero, claro está, comprendiendo la naturaleza de la guerra asimétrica senderista, y pensando políticamente, para hacerle frente a nivel nacional y no regional ni mucho menos local.El valle tiene una extensión territorial de 12 mil kilómetros cuadrados, hay cerca de 460 poblados, es hogar de aproximadamente 150 mil habitantes y en su área se registran –según declaraciones del jefe del Comando Conjunto de las Fuerzas Armadas general EP Francisco Contreras Rivas– 1 408 comités de autodefensa que tienen 3 500 escopetas. Este valle es considerado como el primer productor de droga en el país, con unas 17 mil hectáreas destinadas al cultivo de la coca. El 51% de sus habitantes está desnutrido, el 30% de la población es analfabeta, el 77% de viviendas carece de agua potable y el 91% de servicios higiénicos. Por tanto, los poblados del VRAE se encuentran en extrema pobreza.
Esta es una zona de muy difícil acceso y donde los niveles de desarrollo son mínimos. La opción más recurrente ha sido promover la sustitución de la hoja de coca por cultivos alternativos de café o cacao. El problema radica en la demanda y rentabilidad de los cultivos de uso ilícito. Por cierto, una arroba de coca es casi tres veces más rentable que su similar en cacao, y cuatro veces más que el café. En un valle tan fértil la solución más rentable para los campesinos es el cultivo de la hoja de coca. Esas 17 mil hectáreas dedicadas al cultivo de coca están en un ámbito en que viven más o menos 38 mil familias. Esa cantidad de hectáreas representa la tercera parte de la producción de hojas de coca y la mitad de cocaína que a su vez se produce en el país.Podríamos resumir que los problemas que se presentan en el VRAE son: el narcotráfico, la red terrorista Sendero Luminoso que actúa en simbiosis con el primero –de acuerdo a las características explicitadas anteriormente–, la pobreza extrema, la corrupción, el movimiento campesino, el abandono del Estado y la total desarticulación que existe entre todas las entidades y actores estatales que deberían interactuar coordinadamente entre sí. A dicha problemática se debe agregar que ha faltado una conducción política que imponga la unidad de dirección y lidere realmente las actividades conjuntas de desarrollo y seguridad para forjar una alianza entre el Estado y la población con la implementación de una estrategia que esté orientada a erradicar la pobreza. La situación en el VRAE no es un problema de guerra, es un problema político-social que tiene sólo un componente militar. La seguridad en la zona es para que el desarrollo sea posible. Eso hay que entenderlo.Por tanto, el Perú de hoy se enfrenta a la más grave amenaza a la Seguridad Nacional y a la viabilidad misma del Estado peruano por la confluencia de varios factores de perturbación: el narcotráfico y el terrorismo senderista en el frente interno; y en el frente externo, la peligrosa carrera armamentista de Chile que tiene a sus Fuerzas Armadas expeditas y listas para actuar con una estructura operativa y órganos y medios de apoyo cuyo dispositivo, composición y fuerza están orientados hacia su teatro de operaciones del Norte teniendo como su centro de gravedad al Perú.
Además, hay que tener presente que somos un país productor de hoja de coca y consumidores de droga. A ello se agrega, la peligrosa presencia de las redes del narcotráfico mexicano en el escenario nacional como un fenómeno de creciente influencia, con ciertas manifestaciones de sicariato.En este contexto se moviliza la red terrorista Sendero Luminoso aprovechando la exclusión e injusticia sociales y el abandono del Estado. Ello sin descuidar el trabajo ideológico, explotando el conocimiento del terreno y el dominio que tienen de las zonas del VRAE y el Huallaga, para esconderse y atacar tomando en cada acción la iniciativa y utilizando el factor sorpresa. El Estado vuelve a ser el de antes de 1990, o tal vez peor. Se habla mucho, y se hace poco, para enfrentar de manera oportuna esta grave amenaza con una política acertada.¿Por qué se sigue analizando cuantitativamente, con un enfoque orientado sólo en sus capacidades militares, a la red terrorista Sendero Luminoso? A menudo escuchamos frases como: ¿dónde están los coches bomba, dónde están los apagones, dónde están los muertos? Y como en Lima no pasa nada, no parece haber mayor peligro. Es así que al tocarse el tema de los ataques esporádicos y focalizados en determinado lugar del territorio nacional, se dice, “pero si son tan sólo unos 200 terroristas arniados que están en el VRAE y en el Huallaga como sicarios del narcotráfico”. Sin embargo, a decir del jefe del Comando Conjunto de las Fuerzas Armadas, general Francisco Contreras Rivas, son 600 terroristas los que operan en esas zonas. Por tanto, se sigue incurriendo en el mismo error de reducir la amenaza de Sendero Luminoso a un problema de cantidad de cuadros que tiene para operar militarmente.Se continúa, pues, con el criterio de analizar cuantitativamente a esta red terrorista, destacando sólo sus supuestas capacidades militares. Es decir, se incurre en el craso error de continuar con el caduco esquema de ver sólo la punta del iceberg, lo que es únicamente visible: las acciones terroristas y guerrilleras (ATG), que como bien sabemos por ahora son esporádicas y se producen en las zonas más críticas del país. De esta manera el Estado peruano cae en el engaño estratégico, en la trampa urdida por el terrorismo. El Estado frente a esos ataques pisa el palito, se deja guiar por maniobras de distracción, y se engancha con todo su potencial militar y se va con todo en el Huallaga y el VRAE que es precisamente el objetivo que busca Sendero Luminoso para poder tener la libertad de acción en el resto del territorio nacional, a fin de desarrollar sin ningún obstáculo los otros tres componentes de la ecuación, y en su momento reiniciar la lucha armada dándonos una segunda sorpresa estratégica como lo hizo en 1980 al iniciarse la guerra popular prolongada. Hay que actuar, entonces, sin caer en las maniobras de distracción y prepararse para lo que pronto vendrá.¿Las emboscadas y los continuos hostigamientos a personal militar y policial, así como el ataque realizado el 1 de agosto de 2009 contra la base policial de la Dirección de Operaciones Especiales en San José de Secce, en Huanta, Ayacucho, y el derribamiento de un helicóptero de fabricación rusa MI-17 en la localidad de Sinaycocha el 2 de septiembre de 2009, constituyen hechos probatorios indubitables de que la red terrorista Sendero Luminoso ha recuperado sus capacidades operativas en el ámbito rural? Es cierto, Sendero Luminoso –dentro del esquema estratégico supradicho– ha logrado recuperar su capacidad operativa en el ámbito rural del VRAE y el Huallaga con la realización de ataques esporádicos calculados que se encuentran dentro de los elementos de tipo de guerra asimétrica como variable principal de la Guerra de Cuarta Generación (4GW), pues todas las acciones han sido siempre sorpresivas y ejecutadas con gran letalidad y espectacularidad, lo que ha dado lugar después de cada hecho a una difusión masiva en todos los medios de comunicación durante varios días produciendo –por el momento– terror psicológico sólo en aquellas zonas cercanas a los eventos y que están muy alejadas de Lima.Mientras en la capital cada vez que se produce un ataque terrorista y causa bajas, en el Congreso de la República y en la clase política se produce un debate intrascendente que gira en torno a determinar si son sicarios del narcotráfico los atacantes o si se trata de un rebrote de Sendero Luminoso. Si la estrategia militar está fallando o si esos hechos constituyen una amenaza a la Seguridad Nacional. Es decir, se sigue confundiendo al enemigo y se pierden en definir cuál es el problema y la naturaleza de la amenaza.A la luz de los hechos, y luego de analizar la forma y circunstancias en que se produjeron dichos ataques terroristas asimétricos –en la modalidad de emboscadas, hostigamientos y asalto contra instalaciones de las fuerzas del orden–, podríamos colegir que éstos han sido producto de una planificación eficaz, de un minucioso reconocimiento sobre las respectivas áreas objetivo, de una inteligencia precisa y de la mejor calidad, y de un plan de operaciones audaz que ha cumplido su propósito, casi en su integridad, salvo en el ataque frustrado a la base policial contrasubversiva de la Dirección de Operaciones Especiales en San José de Secce, al norte de Huanta y a tan sólo cinco horas de Ayacucho; allí no lograron su objetivo de tomar la instalación y apoderarse del armamento por la rápida reacción del personal atacado, pero sí causaron cinco bajas, daños materiales y la toma virtual del pueblo por un comando operativo senderista.Esta situación ha producido una conmoción en el país, que observa nuevamente el retorno del terror como un hecho tangible y no difuso ni mucho menos lejano. Sin embargo, se le quiere presentar como un problema de narcotráfico en el VRAE y el Huallaga, pues se sigue pensando que Sendero Luminoso no reviste mayor amenaza para la Seguridad Nacional. Esa apreciación, insistimos, constituye un grueso error. Cabe señalar que la zona donde está ubicada dicha base policial contrasubversiva, en décadas pasadas estuvo bajo el control de la citada agrupación terrorista, y en la actualidad constituye un paso obligado de las redes del narcotráfico que transportan PBC e insumos químicos, lo cual induce a que se confunda al enemigo.Somos conscientes que las Fuerzas Armadas peruanas poseen abundante superioridad militar para una guerra simétrica: eso no se discute. Pero esta capacidad ha sido analizada por las redes terroristas desde la perspectiva de la guerra asimétrica. Buscan combatir a nuestras Fuerzas Armadas con esta lógica y, además, combinando la tecnología de la Internet con las técnicas de insurgencia y terrorismo urbano; es decir, no tratan de derrotar a las fuerzas del orden apelando a operaciones tradicionales ni mucho menos se limitan al uso de medios puramente militares. Por eso ejecutan una hábil estrategia de desgaste con la Guerra Revolucionaria (GR) prolongada queusa variadas tácticas para ir minando progresivamente el valor y la moral de nuestros soldados y policías. ¿Hasta cuándo vamos a continuar siendo mudos espectadores de este golpearse el pecho de las autoridades del gobierno aprista, hasta cuándo asistiremos a esos homenajes con minutos de silencio luego de cada asesinato de militares y policías?Denotar al enemigo terrorista en esta nueva coyuntura que es el siglo XXI —la realidad apabullante de un terrorismo globalizado e ingente tecnología a disposición de estos actores no estatales—supone un enorme desafio, pues se requiere esfuerzos de creatividad de los estrategas y de cada combatiente. Por eso se debe desterrar la creencia que un ejército bien entrenado y bien armado para una guerra simétrica está automáticamente preparado y apto para poder ganar una pequeña y no convencional como la asimétrica. Doctrinariamente las fuerzas militares que exitosamente denotan insurgencias, son usualmente aquellas que son capaces de poder superar su errónea inclinación institucional a realizar guerra simétrica contra redes terroristas asimétricas.Ya hemos precisado que este tipo de guerras son largas y difíciles. Los cuadros terroristas siempre se adaptan a las cambiantes circunstancias por su formación política. Ellos actualmente usan muy bien las herramientas de la información global, no les importa realizar en sus ataques actos bárbaros y crueles —como en el pasado, o superarlos incluso—, pues no observan de modo alguno las formas de convivencia universalmente aceptadas.Debido a lo difícil de su geografía, al conocimiento y dominio que tienen de la zona del VRAE y el Huallaga, así como de la poca presencia del Estado para atender las necesidades básicas de las poblaciones, Sendero Luminoso posee clara ventaja. Sabe que sus operaciones terroristas se ven favorecidas por aspectos como la inexistencia o precariedad de las vías de comunicación, y el total aislamiento de las poblaciones respecto a los grandes centros poblados.Esta situación es hábilmente aprovechada por los senderistas para ganarse la simpatía de la población con el claro propósito de restablecer fácilmente bases de apoyo social y popular, lo que luego se traduce en inteligencia para el planeamiento de futuras operaciones, pues los planificadores terroristas y sus comandantes de operaciones obtienen información certera de los movimientos del personal militar y policial.Conforme a ello, tanto Sendero Luminoso como las fuerzas del orden, requieren de una efectiva inteligencia que les posibilite lograr el éxito en la misión emprendida. Por eso es evidente que dicha red ha creado y mantiene en el terreno redes de inteligencia, que paralelamente, buscarán, por todos los medios, neutralizar los aparatos de Inteligencia del Estado y sus respectivas capacidades. ¿Las tiene? En todo lugar, no sólo en el \TRAE y el Huallaga. En la guerra asimétrica se impondrá quien mantenga la iniciativa y haga uso del factor sorpresa en sus operaciones. Cuando escribo este libro, Sendero Luminoso mantiene la iniciativa, y nos sorprende cada vez con mayor frecuencia con sus ataques espectaculares y letales. La única cosa predecible es que serán impredecibles. De allí tenemos que partir para combatirlos.
A fin de precisar el perfil operacional de esta red terrorista durante el último lustro, analizaremos puntualmente sólo aquellos ataques más espectaculares y letales que se han ejecutado en la zona del VRAE y el Huallaga, con el claro propósito de conocer las principales manifestaciones doctrinarias del tipo de guerra asimétrica que desarrollan contra el Estado peruano.Esos ataques terroristas se caracterizan por utilizar como un patrón de conducta la táctica de las emboscadas, bajo el principio doctrinario de persistencia, por ser de sencilla ejecución. Entonces, ¿qué es una emboscada? Es un ataque que suele ejecutar la red terrorista Sendero Luminoso utilizando el factor sorpresa, escogiendo el lugar más conveniente, el momento adecuado y manteniendo siempre la iniciativa contra patrullas militares o equipos policiales que están en movimiento o detenidos temporalmente, con la finalidad de destruirlos y apoderarse de su armamento y municiones.La ejecución de cualquier emboscada requiere de un planeamiento táctico, para lo cual se necesita de la mayor cantidad de información que posibilite a los planificadores terroristas llegar al mayor detalle posible, tanto en su concepción como en la preparación y ejecución. Todo ello bajo el principio doctrinario de la simplicidad en la realización de los ataques a un bajo riesgo operativo, pero espectacular en sus resultados, y en cuyo propósito se debe mantener la seguridad de las operaciones, a fin de no ser detectadas antes de su ejecución por las fuerzas de seguridad y los servicios de inteligencia.En todas las emboscadas realizadas por los senderistas durante el último lustro se puede observar que han demostrado la gran capacitación de los perpetradores, lo que en términos tácticos se podría resumir, en una acertada elección de cada blanco de ataque, una planificación eficaz, sencilla y audaz de las operaciones, una inteligencia no sólo precisa y de la mejor calidad sobre los movimientos del personal militar y policial, sino una buena evaluación, supervisión y ejecución certera con los resultados previstos por los planificadores terroristas y sus comandantes de operaciones.Otra de las tácticas comunes que suelen emplear estas redes terroristas son las acciones de hostigamiento por ser estas de sencilla ejecución. Entonces, ¿qué es el hostigamiento? Es el conjunto de acciones que lleva a cabo Sendero Luminoso para acosar y mortificar a las fuerzas del orden, esencialmente con el uso de las armas de fuego o cualquier otro medio que sea capaz de mantenerlas en estado de permanente tensión y zozobra. La finalidad de las operaciones de hostigamiento es infligir bajas y evitar el descanso de las tropas mediante incursiones contra bases contrasubversivas y la persecución de patrullas. Por lo general suelen ser el paso previo para la ejecución de emboscadas. Por eso son peligrosas.Antes de ingresar al análisis de —sólo— las principales emboscadas senderistas durante el último lustro, recordaremos que el último atentado espectacular y letal que realizó está red terrorista en Lima fue el 20 de marzo de 2002, cuando hicieron detonar un coche bomba que tuvo un saldo trágico de 10 muertos, 30 heridos y cuantiosos daños materiales contra el centro comercial El Polo, frente a la Embajada de los Estados Unidos de América.Este atentado se ejecutó horas antes de la visita oficial al Perú del presidente George W. Bush.
Posteriormente, en junio de 2003, un comando operativo de Sendero Luminoso secuestró a un total de 71 trabajadores de la empresa argentina Techint, constructora de un tramo del gasoducto de Camisea, en Toccate, provincia de La Mar, en Ayacucho. No les hicieron daño y más bien procedieron posteriormente a liberarlos sin un solo rasguño. En esa oportunidad se especuló sobre el pago de un cupo de guerra como recompensa, lo cual fue negado por los senderistas mediante la difusión de un mensaje dirigido a los empresarios. En este mensaje, curiosamente, señalaban que no sabotearían dicho proyecto gasífero, pues éste beneficia al pueblo peruano. Lo grave de esta operación terrorista fue que se llevaron una cantidad muy grande de explosivos que hasta ahora les puede estar sirviendo.Desde el año 2001, en que Sendero Luminoso reinició esporádicamente la táctica de sus emboscadas en el VRAE y en el Huallaga, estas operaciones aumentaron exponencialmente llegando hasta 20 en el lapso comprendido a partir del año 2007 hasta agosto de 2009. Es decir, estamos hablando de un promedio de 8 ataques por año, o un ataque cada cuarenta y cinco días en promedio A guisa de comentario adicional señalaremos que en el período comprendido entre el 9 de octubre de 2008 al 9 de abril de 2009 se produjeron las tres emboscadas más letales en un lapso de seis meses.
A ello debe agregarse, que no habiendo pasado ni cuatro meses desde la última emboscada de abril de 2009, los planificadores terroristas y sus comandantes de operaciones decidieron cambiar de táctica de ataque y realizaron un asalto a la base policial de la Dirección de Operaciones Especiales en San José de Secce en Huanta, Ayacucho, el 1 de agosto de 2009. Este hecho que finalmente fue frustrado, nos permite determinar que van en una línea de incremento y diversificación de los ataques.Estas operaciones al ser analizadas bajo los principios generales de la probabilidad y de la persistencia, nos podrían señalar como un estimado predictivo que los sucesivos ataques se harán bajo el principio de combinación. Es decir, utilizarán con mayor frecuencia e indistintamente, emboscadas o asaltos contra instalaciones, pues ya abrieron el abanico en sus formas de acción, lo cual las hace más peligrosas y obliga a las fuerzas del orden a incrementar las medidas de seguridad en sus patrullajes y desplazamientos, mantenerse alertas en las instalaciones ensayando con su personal el plan de seguridad y el de comunicaciones.
Durante el año 2005 las acciones más significativas que realizó Sendero Luminoso utilizando la táctica de emboscadas se concentraron en Huancavelica, Huánuco, San Martín y Ayacucho. Las víctimas fueron tres suboficiales de la Policía Nacional, muertos el 20 de febrero en Leoncio Prado, Huánuco; un juez y un suboficial de la Policía Nacional asesinados el 23 de julio en Nuevo Progreso, San Martín; un suboficial de la Policía Nacional herido el 16 de agosto en Lamas, San Martín; cinco suboficiales de la DIRANDRO muertos y un fiscal herido el 5 de diciembre en Palmapampa, Ayacucho, y finalmente un suboficial de la Policía Nacional herido tras ser alcanzado por disparos de elementos senderistas contra tres helicópteros (dos de la Policía y uno del Ejército) el 8 de diciembre en San Martín de Pangoa, Junín.
El ataque más letal y espectacular del año 2005 ocurrió el 20 de diciembre de dicho año, cuando un comando operativo senderista emboscó a una patrulla policial de nueve efectivos de la Comisaría de Aucayacu. Sólo uno sobrevivió, pues los otros ocho fueron acribillados. Esa emboscada ocurrió en circunstancias en que una camioneta policial, con los nueve efectivos a bordo, regresaba de Tingo María a su base en Aucayacu. Al momento de ingresar en la curva que da a un caserío muy pequeño en la zona de Angashyacu, a un kilómetro y medio de Aucayacu, fueron objeto de un ataque sorpresivo por un comando operativo senderista que lanzó fuego cruzado con armas de largo alcance de distinto tipo y calibre y uso de granadas de guerra.Como resultado del feroz ataque, la camioneta cayó a un abismo con todos sus ocupantes. Fallecieron instantáneamente ocho policías, y uno quedó herido con la tibia destrozada por los proyectiles recibidos. Luego de ello los atacantes se apoderaron del armamento y municiones de todos los efectivos eliminados, así como del asignado al herido.El personal policial que fue objeto de la emboscada estaba al mando del mayor de la Policía Nacional Martínez Palacios, y viajaba de Aucayacu a la localidad de Tingo María para pasar una revista en esa ciudad. Esta rutina la realizaban con cierta frecuencia, lo que habría sido detectado por la inteligencia senderista que los vio partir juntos. Los terroristas sabían que retornarían de la misma manera, y por el camino ya conocido.
De modo que con esa información, los planificadores terroristas eligieron el lugar del ataque, en este caso la curva, porque era el punto más conveniente para montar la emboscada, y decidieron que el comando operativo la ejecutará en el momento adecuado, utilizando el factor sorpresa a un mínimo costo operacional. Aquí se cumplió la primera regla del conflicto asimétrico, que es el factor sorpresa.Lamentablemente, el mayor Martínez que era un oficial con vasta experiencia en la lucha contraterrorista, pues había prestado servicios como jefe de la Sección Contra el Terrorismo (SECOTE) de Huánuco, cargo que dejó para asumir el comando de la Comisaría de Aucayacu, perdió los reflejos y descuidó las medidas de seguridad para los desplazamientos. Ese descuido no sólo le costo la vida a él, sino a siete efectivos policiales, y dio lugar a que los senderistas se apoderaran de sus armas, con lo cual esta red terrorista propinó un duro revés a las fuerzas del orden.En el año 2006, una de las operaciones más significativas fue la emboscada realizada el 16 de diciembre cuando una patrulla de suboficiales de la Policía Nacional, y personal de Enaco, fueron atacados por otro comando operativo de manera sorpresiva en una carretera próxima al río Apurímac, en Ayacucho. En esta emboscada fallecieron seis efectivos policiales. El factor sorpresa fue determinante para el éxito de la operación senderista.Es de público conocimiento que desde fines del año 2000, en que asume la presidencia el doctor Paniagua, hasta concluir el gobierno del doctor Toledo, se paralizó toda actividad de lucha contra el terrorismo. Particularmente durante el régimen de Toledo no se hizo nada. Si bien en el 2003 se asignó al Ministerio de Defensa la responsabilidad de combatir al senderismo en el VRAE, sólo sellevaron a cabo acciones muy puntuales de reacción ante cualquier hostigamiento debido a la falta de voluntad política.
Recién en junio de 2006 se retorna la decisión política de hacerlo, para tratar de fortalecer el orden interno y buscar afianzar la presencia del Estado. Es recién durante la gestión del ministro de Defensa embajador Allan Wagner Tizón, cuando se implementan cuatro planes en diferentes zonas del territorio nacional, aquejadas por la actividad de las redes terroristas y del narcotráfico. Estos son el plan VRAE, el plan Huallaga, el plan Putumayo y el plan Costa Norte.Como consecuencia del plan VRAE , y con fecha 16 de diciembre de 2006, las Fuerzas Armadas procedieron a designar al general de brigada EP Raymundo Flores Cárdenas corno comandante del Comando Especial del VRAE con sede en la base militar de Pichari, provincia de La Convención, departamento del Cusco, con la finalidad de conducir la lucha contra la red terrorista Sendero Luminoso. Con esta designación se llenó un vacío de seis años dejado por el Estado, y que ocupó el senderismo, pues en diciembre de 2000 se desactivaron todas las bases contrasubversivas.
El general Flores fue designado para ejercer dicho empleo de acuerdo a su hoja de vida profesional en el Ejército. Con el grado de teniente coronel tuvo el comando del Batallón Contraterrorista N° 34 en Pampa Cangallo, ubicado al sur del departamento de Ayacucho, desde 1993 a 1995. Con el grado de coronel se desempeñó corno jefe del Departamento de Planes y Operaciones del Comando Operacional del Sur. Ello lo capacitaba para asumir dicha función debido a su experiencia.
El plan VRAE fue concebido en diciembre de 2006 para ser desarrollado en el mediano plazo, y dar fruto luego de cinco años de lucha contra los remanentes de Sendero Luminoso —como si fuera un saldo de lo que habría quedado de esta red terrorista— y contra el tráfico ilícito de drogas en los valles de los ríos Apurímac y Ene. Este plan descansa en un pilar militar, un pilar policial y un pilar de desarrollo económico y social para estos dos valles. El plan Putumayo se concibió para brindar seguridad a la frontera peruana con Colombia, y frente a posibles acciones de las FARC que se encuentran al otro lado de la frontera. El plan Huallaga se concibió con el objetivo de mejorar la coordinación de las acciones que realizan las Fuerzas Armadas con apoyo de la Policía Nacional para enfrentar a las redes terroristas que operaban en coalición con las del narcotráfico; la responsabilidad principal de este plan recayó sobre el Ministerio del Interior. Finalmente, el plan Costa Norte se diseñó para combatir el narcotráfico, el contrabando de combustibles, la piratería y la pesca ilegal.En el año 2007, cuando era jefe del Comando Conjunto de las Fuerzas Armadas el almirante AP Jorge Montoya Manrique, militarmente se intensificaron las operaciones desde el ataque en Huachocolpa, acaecido en marzo de dicho año, instalándose por tal motivo una base contraterrorista en dicho lugar, hecho que significó presencia militar continua en la zona, con sus patrullajes respectivos. De igual manera; se instaló otra base en Cochabamba Grande, a fin de brindar seguridad.En ese mismo año ocurrieron dos hechos significativos. El primero ocurrió el 2 de noviembre, cuando un comando operativo atacó la Comisaría de Acobamba, Apurímac, victimando a un teniente de la policía y dejando herido a otros tres efectivos policiales. El segundo sucedió a los pocos días, el 13 de noviembre, cuando un civil con cuatro efectivos policiales se desplazaban en un convoy policial y sorpresivamente fueron emboscados por otro comando senderista en la localidad de Tayacaja, Huancavelica, dejando muertos a los cuatro policías.Durante la gestión del almirante Montoya se mejoró notablemente la eficiencia combativa y la interoperabilidad entre los institutos, al haber impulsado desde la jefatura del Comando Conjunto la integración del Ejército, de la Marina y de la Fuerza Aérea, logrando la cohesión de las Fuerzas Armadas durante el año 2007.
Ya en el 2008, el 24 de marzo, se produjo otra emboscada. Esta fue perpetrada por un comando operativo terrorista contra una patrulla policial cerca de la Pampa de la Quinua, camino al VRAE; en este ataque falleció un policía y resultaron heridos 14 efectivos. El 27 de junio de 2008, se produjo un ataque a una patrulla de las Fuerzas Armadas en la zona de Sanabamba, provincia de Huanta, que forma parte del VRAE, que dejó a un marino muerto.
Frente a la creciente amenaza de las redes terroristas, y con el objeto de llenar un vacío –la irresponsable desactivación del Arma de Inteligencia, según ya hemos visto– que lastimosamente duró un poco más de 9 años y medio, el gobierno del doctor García se vio obligado mediante Decreto Supremo N° 013-2008-DE/EP del 20 de julio de 2008, a disponer la activación de dicha Arma dentro de la estructura del Ejército Peruano, por razones vinculadas a la Seguridad Nacional. La actual coyuntura no sólo justifica, sino que demanda, con carácter de urgencia, la activación del Arma de Inteligencia; es decir, la capacitación especializada de cuadros de la oficialidad del Ejército. Sólo a través de elementos altamente preparados y especializados se puede contribuir en forma sustancial con la búsqueda de información y la producción de inteligencia necesaria para prevenir, y neutralizar, los riesgos y amenazas en el frente interno y en el frente externo.Después de un intervalo de varios años en que los comités de autodefensa fueron abandonados por el Estado y los sistemas de vigilancia e inteligencia resultaron desactivados, se da inicio a las acciones militares con la “Operación Excelencia 777". Con limitaciones obvias generadas por el mencionado intervalo, el 30 de agosto de 2008, por orden del jefe del Comando Conjunto de las Fuerzas Armadas, almirante AP José Ricardo Aste Duffos, el Comando Especial del VRAE a cargo del general Raymundo Flores Cárdenas da inicio a esta operación, cuyo objetivo era ocupar el estratégico enclave Bidón, que estaba bajo el control terrorista, para posteriormente llegar al centro principal de sus actividades, es decir, más adentro, en la localidad de Vizcatán.Ese mismo día las fuerzas militares ocuparon Bidón, y luego prosiguieron con la ofensiva en los días subsiguientes. Es así que tomaron los campamentos terroristas abandonados en Quebrada Pesca, Torococha, Mazangaro, José Olaya, Unión, Mantaro, Sarabamba hasta llegar a Río Seco, donde fueron acosados por constantes ataques provenientes de elementos terroristas aprovechando el terreno. Estos ataques causaron 15 heridos a la Compañía Especial N° 31 pese a que operaba encubierta.
Luego fue tomado Vizcatán, que era el objetivo principal por alcanzar, al ser considerado como un santuario emblemático senderista, que hasta ese entonces fue un bastión inexpugnable. Este punto se encuentra geográficamente ubicado en la confluencia del río Vizcatán con el río Mantaro, también conocido como río Pichis. Fue un desafío para el Ejército tomar el control de Vizcatán, lugar que estuvo dominado entre quince y veinte años por Sendero Luminoso.Está demostrado, indubitablemente, que el recorte presupuestal de los años 2003 y 2004 durante el gobierno de Toledo Manrique, debilitó ostensiblemente la lucha contra el terrorismo, y ese hecho lo ha reconocido el actual Comandante General del Ejército, general Otto Guibovich Arteaga, en su primera entrevista periodística dada –luego de cumplir dos meses en el cargo– al diario El Comercio en su edición del 7 de febrero de 2009 en la página Al2. Otto Guibovich es preguntado: “¿Cómo explicar a la población que en los últimos nueve años las Fuerzas Armadas no han sido capaces de acabar con los remanentes del terrorismo? ¿Cuándo lo harán?” Él responde: “....esta lucha se vio afectada por el fuerte recorte presupuestal que tuvimos en el 2004. Sólo para comparar, en el 2001 el presupuesto era de S/. 1 688 millones, en el 2002 de S/. 1 227 millones, en el 2003 bajó a S/. 964 millones y en el 2004 se redujo a 845 millones”.¿Qué generó este recorte? “Generó la reducción de bases antisubversivas. Lógicamente, produjo que los remanentes recuperasen su capacidad de acción, se consolidara sus vínculos con el narcotráfico (...) Si en ese entonces no nos hubieran quitado presupuesto, hubiéramos avanzado en vencer a los remanentes que están en el valle de los ríos Apurímac y Ene, y otros puntos inhóspitos de nuestro país”. Reconoció igualmente el general Guibovich Arteaga.El 9 de octubre de 2008 una patrulla del Ejército Peruano de la base contraterrorista de Cochabamba Grande, que forma parte de la 31° Brigada de Infantería bajo el comando del general de brigada EP Luis Antonio Flores Cornejo, fue invitada como delegación militar por la alcaldesa Belfa Común Gavilán para participar en horas dela mañana en una ceremonia protocolar. Era una ceremonia con ocasión del aniversario del distrito de Tintay Punco, provincia de Tayacaja, en la región de Huancavelica, en virtud de lo cual dicha autoridad edilicia había alquilado cuatro camiones de uso particular que puso a disposición de la comitiva militar, la cual al mando del teniente del Ejército Baxter Visa Nina, viajó desde su base a la citada localidad con autorización de su comando.Después de haber participado el personal militar en el izamiento del pabellón nacional y en un desfile, y tras concluir la ceremonia protocolar a la que asistieron autoridades locales, la patrulla procedió a embarcarse en los cuatro vehículos particulares prestados a fin de retornar a su base de Cochabamba Grande en Pampas. Es en ese viaje de regreso, siendo las 18 horas y estando el convoy a la altura de la zona “Curva Sajona”, que es objeto de una emboscada montada por un comando operativo terrorista, el mismo que hizo detonar una carga explosiva debajo de un camión que transportaba civiles y militares; luego abrieron fuego nutrido con armas de largo alcance de diverso tipo y calibre contra los ocupantes de los cuatro vehículos atacados, quienes pese a la sorpresa reaccionaron respondiendo el fuego y manteniendo un enfrentamiento que duró varias horas.Como consecuencia de la emboscada murieron 13 soldados y 2 civiles, resultando además heridos dos pobladores, uno de ellos un niño de cinco años. La cifra de soldados fallecidos se elevó al día siguiente a 14, debido a las heridas de necesidad mortal que sufriera uno de los efectivos acribillados. Como es de rutina, los facinerosos senderistas despojaron a los soldados fallecidos y heridos de 18 fusiles Galil con sus respectivas municiones, y luego huyeron.Los planificadores terroristas escogieron previamente el lugar del ataque: una zona donde el terreno les brindaba las facilidades para poder realizar la emboscada; eligieron, además, la hora más adecuada, en este caso las 18:00 horas, a fin de esconderse aprovechando la oscuridad de la noche y la vegetación existente a efectos de esperar la orden de su comando operativo para ejecutar el ataque.Esta operación sorpresiva, que ha cumplido con las cuatro fases para realizar un ataque terrorista, constituye un duro golpe para el Ejército Peruano por la cantidad de bajas sufridas y la mencionada sustracción de 18 fusiles Galil. Se podría considerar que ha sido el ataque más fuerte que han sufrido las Fuerzas Armadas en lo que va del presente siglo. El exceso de confianza, y el desconocimiento doctrinario de la forma y modus operandi de Sendero Luminoso son dos elementos que lamentablemente contribuyeron a facilitar la emboscada senderista.
¿Si no se ignoraba que la provincia de Tayacaja estaba declarada Zona en Estado de Emergencia, cómo es posible que se haya autorizado enviar a una patrulla militar en camiones particulares para asistir a una ceremonia protocolar dentro de un área donde los últimos tres años se han producido hasta tres emboscadas terroristas contra las fuerzas del orden? Es por ello que el ministro de Defensa Antero Flores-Aráoz tuvo que admitir, ante la Comisión de Defensa del Congreso, que la negligencia de los respectivos jefes militares de Huancavelica permitió el desplazamiento de la patrulla por la noche en camiones particulares sin adoptar las mínimas medidas de seguridad.Afectado por las bajas, el general de brigada EP Luis Antonio Flores Cornejo, en su calidad de comandante general de la 31° Brigada de Infantería, advirtió, con voz entrecortada, que vengaría la muerte de sus 14 soldados: no pararía hasta dar con el paradero dedos responsables. En sus palabras de despedida pronunciadas durante la misa de cuerpo presente señaló además: “han cometido un atentado cobarde, son unos miserables que se esconden en la oscuridad del monte para atacar y no saben dar la cara para luchar frente a frente (...) los que vestimos este uniforme verde nos comprometemos a seguir combatiendo estas lacras. Hoy estos soldados descansan en paz, pero sus muertes serán vengadas, confíen en el Ejército”.Estas palabras nos demuestran el estado de ánimo que existe entre la oficialidad del Ejército frente a lo que significa la amenaza del terrorismo en el país. Es por eso que despiden a sus compañeros de armas con la letra de una canción que dice: “por qué perder las esperanzas de volverte a ver... no es más que un hasta luego...”.Habiendo transcurrido sólo 37 días de la emboscada contra la patrulla del. Ejército en Tintay Puncu, provincia de Tayacaja, región de Huancavelica, el 16 de noviembre de 2008 se produjo otra emboscada terrorista, esta vez contra un vehículo policial en la provincia de Huanta, en la región Ayacucho. El hecho sucedió a las 2:30 de la madrugada, cuando cuatro efectivos de la policía de carreteras inspeccionaban en el patrullero CT-1425 la zona de Segllas Baja, a tres kilómetros de Huanta en la ruta a Luricocha.
En esas circunstancias el vehículo fue atacado por un comando operativo senderista que se encontraba oculto en unos matorrales y que aprovechando la oscuridad, sorpresivamente hizo fuego a discreción contra el carro policial. Como consecuencia de ello el conductor fue alcanzado por los proyectiles y perdió el control, chocando el vehículo con un árbol de molle y volcándose luego al lado derecho de la vía que conduce a Luricocha. Tres efectivos fallecieron.Posteriormente, los atacantes se apropiaron del armamento policial: cuatro fusiles AKM, tres pistolas marca Pietro Bereta y las respectivas municiones. El único policía sobreviviente resultó con heridas por múltiples impactos de proyectil en las piernas. Nuevamente se confirmaba que esta es una de las formas como el senderismo obtiene el armamento que posee: sustrayéndolo a las fuerzas del orden durante las emboscadas.Resulta evidente que estas dos operaciones terroristas están directamente relacionadas con la ofensiva que las Fuerzas Armadas y la Policía Nacional vienen desarrollando desde el 30 de agosto de 2008 en el VRAE, área que aún es un bastión importante de las redes terroristas que operan formando coaliciones con las del narcotráfico.Apenas transcurridas muy pocas horas desde que ocurriera la emboscada senderista en Huanta, ese mismo día 16 de noviembre de 2008 una patrulla militar perteneciente al Comando Especial del VRAE tuvo un enfrentamiento con una columna de esta red terrorista en la zona de Bidón, en Vizcatán, departamento de Ayacucho. Como consecuencia de este hecho resultaron heridos dossoldados del Ejército. Es en esas circunstancias que poco después un helicóptero de las Fuerzas Armadas, que intentaba recoger a los heridos, también fue atacado y otro soldado fue impactado por el fuego de francotiradores encubiertos.
Debido a la cantidad de operaciones terroristas ejecutadas contra personal de las fuerzas del orden se comenzó a cuestionar desde esa época las bondades del llamado Plan VRAE, pues se sostiene que no ha considerado a los verdaderos actores que están en esa zona, esto es, no se ha tomado en cuenta a los alcaldes, a los gobiernos regionales y a las organizaciones sociales de base.Para muchos analistas el citado plan se ha convertido en un conjunto de acciones puramente militares, pero el extremo de mayor importancia, que debería ser la presencia del Estado, no se toma en cuenta en lo absoluto, con lo cual el “plan” se reduce únicamente a la ejecución de operaciones militares. Entre tanto, las obras que debieron hacerse en esta área geográfica del país, no se inician, pues no hay presencia de los sectores del Ejecutivo como los ministerios de Salud, de Educación, de Agricultura, de la Mujer, entre otros. En ese sentido, la “Operación Excelencia 777" ha logrado imponer una ofensiva militar en Vizcatán, y ha ocupado espacios físicos que han generado el despliegue de Sendero Luminoso de Río Seco a Tayacaja, pues conoce muy bien la zona.En medio de esta vorágine de cuestionamientos al Plan VRAE, el 26 de noviembre de 2008 un comando operativo senderista realizó otra emboscada contra un convoy policial conformado por cuatro camionetas de la Unidad de Patrullaje Especial del frente policial Huallaga. La operación se realizó sorpresivamente en el denominado “Puente Chino”, que está en el distrito de Daniel Alomía Robles, provincia de Leoncio Prado, ubicado en el kilómetro veinte de la carretera Jorge Basadre.
Producto de esta emboscada y luego de un intenso fuego con el uso de granadas de guerra y cohetes instalaza, resultaron muertos cuatro efectivos policiales y cinco quedaron gravemente heridos. Es obvio que esta operación de Sendero Luminoso en el Alto Huallaga, zona que está bajo responsabilidad de la Policía Nacional, obedece a una represalia luego de los golpes dados por las fuerzas policiales: en sendas intervenciones cayeron los senderistas “Clay”, “JL” y “Piero”.Casi un mes después, el 22 de diciembre de 2008, el Departamento de Estado norteamericano emitió un informe de ese país que sugiere no viajar al Perú debido a que considera peligrosas a diversas ciudades. En Lima los problemas más cotidianos –señala el informe “Perú: Información específica del país”– son los robos, secuestros al paso y los taxis enemigos. En tanto, señala como zonas restringidas a Cusco, Ayacucho, Huancavelica, Huánuco, Junín, San Martín, Loreto, Ucayali, debido a la presencia de Sendero Luminoso y el narcotráfico. Dicho informe especifica, además, que en cinco regiones del Perú se han producido ataques terroristas contra patrullas de las Fuerzas Armadas y de la Policía Nacional. Finalmente considera al departamento de Loreto, zona fronteriza del Perú con Colombia, “como extremadamente peligroso” por la presencia de la guerrilla colombiana y de narcotraficantes.Seis días después del comentado informe del Departamento de Estado sobre el Perú, el 28 de diciembre de 2008, el ministro de Defensa de ese entonces, Antero Flores-Aráoz, informó de dos ataques senderistas con un saldo fatal. En horas de la mañana un efectivo militar murió, y otro resultó herido durante un combate en tierra que se prolongó por varias horas cuando se realizaba un patrullaje en Vizcatán.Posteriormente fue atacado, en otra área de Vizcatán, un helicóptero del Ejército que realizaba tareas logísticas. Este ataque fue perpetrado con proyectiles que lograron atravesar una de las ventanas de la nave, dejando heridos de bala al ingeniero de vuelo y a un soldado. A pesar de lo ocurrido, el ministro consideró como Lino de los logros mayores de su sector en el año 2008 el ingreso de las Fuerzas Armadas a Vizcatán, pues, en su criterio, ese hecho significó el golpe más duro que ha recibido Sendero Luminoso, ya que a esa zona “la llamaban el santuario, y nadie que no fuera de su entorno entraba”.No pasaron ni cinco meses de ocurrida la última emboscada contra personal policial, cuando en plena Semana Santa, el jueves 9 de abril de 2009, se produjo otra emboscada terrorista contra dos patrullas del Ejército pertenecientes al Batallón de Infantería Motorizado N° 51, dependiente de la Segunda Brigada de Infantería con sede en Huamanga. La emboscada se produjo en una zona que es influencia de Vizcatán, al noroeste del poblado de Sanabamba por las inmediaciones del cerro Ccompata, distrito de Ayahuanco, provincia de Huanta, departamento de Ayacucho.Esta operación senderista tuvo una peculiaridad: los planificadores terroristas concibieron y diseñaron la ejecución de una doble emboscada, simultánea y continuada, contra dos patrullas del Ejército compuestas por 30 efectivos militares y un civil que les servía de guía, al comando del capitán EP Fernando Suárez Pichilingue. Las patrullas tenían por misión efectuar un reconocimiento y ganar posiciones en una zona determinada del terreno, pues fueron a tomar un “huaro” que es un cable que posibilita pasar de un lado a otro del río, el cual fue construido por los senderistas. Este “huaro” une Ayacucho con Junín. Estando a la misión recibida, el capitán Suárez estructuró las dos patrullas con 15 hombres cada una. La primera, bajo su comando directo; y la segunda, al mando del teniente EP Darcy Samillán Carrasco.
Con ese dispositivo partieron las dos patrullas, una seguida de la otra a muy corto trecho, para facilitar el comando y control de la fuerza de reconocimiento hasta llegar a su objetivo y tomar posiciones. No tenían la más mínima información de inteligencia sobre los posibles movimientos de elementos terroristas en la zona donde se desplazaban. De haber contado con esa información hubieran podido adoptar las medidas de seguridad correspondientes, habida cuenta, además, de la alta posibilidad de emboscadas u hostilizaciones. Iban a ciegas al matadero, ya que ni siquiera imaginaban que su dispositivo, composición y fuerza, así como su misión e itinerario de desplazamiento era conocido por los planificadores terroristas y sus comandos de operaciones. El escalón superior a los jefes de patrulla tampoco poseía ningún indicativo de inteligencia sobre la posible emboscada. Habían sido penetrados por la inteligencia senderista y no se daban cuenta. Así, ciegos, se desplazaron hasta llegar a la zona de muerte confiados en el azar. ¡Qué tal negligencia!¿Luego qué paso? Los planificadores terroristas concibieron un plan audaz escogiendo hábilmente en el terreno un punto preciso que les daría las mejores posibilidades para el éxito de su misión. En efecto, de toda la ruta por donde se desplazarían las patrullas eligieron correctamente una trocha de tránsito que obligaba a marchar en fila india; este punto, adicionalmente, era dominado desde las alturas, porque ese camino está entre un cerro y un precipicio de 400 metros. Esa fue la mejor zona en el terreno, a fin de preparar una emboscada a un mínimo costo operativo para los perpetradores. Luego de reconocido el punto en el terreno por el comandante de la operación senderista, éste procedió a preparar el escenario de la emboscada con sus respectivos equipos de intervención. Los terroristas pusieron los explosivos de manera encubierta en aquellos puntos estratégicos de la pared, colocando un cordón detonante de 50 a 100 metros y amarraron botellas y otros explosivos a éste, enterrándolos luego en la pared del cerro, con el claro propósito que cuando se prendiera la mecha detone todo, y cause el mayor daño posible en toda la extensión fijada como el área de emboscada.Preparado así el escenario de ataque con la debida anticipación, tienen que haber realizado los respectivos ensayos hasta que cada equipo de intervención hubiera interiorizado su misión en el área de responsabilidad asignada. Luego, estando posesionados en el terreno, sólo les quedaba esperar que llegue la hora en que las patrullas pasaran por la trocha para atacarlas, utilizando el factor sorpresa y manteniendo en todo momento la iniciativa.
Cuando el hombre de avanzada de la primera patrulla, que estaba comandada nada menos que por el capitán Fernando Suárez Pichilingue, llegó a la altura de la trocha, observó que no había ningún movimiento extraño, ni indicio que le permitiera detectar que estaban ingresando a la zona de muerte; confiado avanzó, seguido por los 14 miembros de su patrulla y el guía nativo. Hasta ese instante ninguno de los integrantes de esta patrulla pudo detectar ni percibir que estaban encuadrados dentro del área de una emboscada, por lo que siguieron caminando normalmente sin adoptar las respectivas medidas de seguridad.
Las explosiones se produjeron en el instante en que la primera patrulla, comandada por el capitán Fernando Suárez Pichilingue, se encontraba encuadrada en toda la zona de muerte. Como resultado del estallido toda su gente prácticamente voló, fue lanzada por los aires. Algunos fallecieron como consecuencia de la explosión, otros por la caída al precipicio. Sólo hubo un sobreviviente de esa patrulla, mientras que de la segunda, falleció un soldado, salvando la vida el teniente Darcy Samillán Carrasco; el resto del personal quedó con heridas de consideración diversa.Esta emboscada causó 14 muertos, cuatro heridos y un desaparecido. Sólo sobrevivieron 11 efectivos, de un total de 30. Estos consiguieron librarse de una muerte segura al lanzarse a tierra y rodar, en medio de la polvareda producida por las detonaciones, hacia el fondo de un barranco, por donde fugaron en distintas direcciones.Los atacantes se encontraban estratégicamente apostados en escondites localizados en la cima del cerro Crompata, desde donde lanzaron ráfagas sucesivas contra los sobrevivientes heridos, y es a partir de esas posiciones que acto seguido prestaron seguridad a otro grupo que descendió y se encargó de rematar a las víctimas para robarles 19 fusiles Galil, 2 lanzacohetes RPG, 2 lanzapepas, 1 ametralladora MAG y abundante munición. Esta emboscada constituye, también, uno de los ataques más fuertes y graves que ha sufrido el Ejército Peruano en el corriente siglo.A manera de reflexión sobre este lamentable hecho formularemos algunas consideraciones que estimo deben tenerse presentes para evitar que en el futuro las fuerzas militares del Estado sean sorprendidas por ataques de las redes terroristas. En efecto, cualquier operación de esta naturaleza requiere previamente que sus planificadores terroristas dispongan de tres elementos esenciales de información: una inteligencia muy puntual, de tiempo suficiente y de medios adecuados.Para el planeamiento de esta emboscada los comandos operativos han tenido previamente la inteligencia precisa, oportuna y eficaz sobre el dispositivo, composición y fuerzas, así como de los movimientos exactos que realizarían las dos patrullas del Ejército, a fin de determinar la forma de acción por adoptar. Luego contar con el tiempo necesario para la conformación de los diferentes equipos de ataque, contención y seguridad que participarían en la emboscada, preparar los explosivos, disponer el armamento necesario, elegir la zona de ataque en el terreno y finalmente ensayar la operación.
Entonces, si esto es así: ¿Cómo es que los planificadores terroristas obtuvieron anticipadamente la información de que saldrían de su base dos patrullas? ¿Cómo supieron el itinerario de las dos patrullas? ¿Cómo se enteraron del día y la hora exacta del desplazamiento de las patrullas? Evidentemente, ha existido una fuga de información gigantesca, lo que amerita una exhaustiva investigación para determinar el nivel de daños que han sido causados, ya sea por una infidencia o por haber sido penetrados en la propia base por la inteligencia terrorista. En ambos extremos la situación es complicada y peligrosa.Es evidente que la fuga de información no ha sido detectada. Y esto porque no se dispone de un sistema de contrainteligencia que nos pueda proteger de las amenazas de inteligencia que actores no estatales internos conducen a través de sus estructuras de inteligencia contra nuestras fuerzas. La poca inteligencia de combate disponible es ineficaz en este tipo de guerras. Eso hay que entenderlo bien: se está incurriendo en el craso error de planificar operaciones militares basadas en una inteligencia táctica simétrica que no es la adecuada contra enemigos asimétricos, silenciosos y ocultos que son impredecibles, que están en todos lados y en ninguno, que pueden dar golpes terribles cuando así lo deseen sus planificadores usando cualquier medio disponible.Debemos comprender que la red terrorista Sendero Luminoso de 2009 es muy distinta a la de sus inicios en 1980. Así como su líder Abimael Guzmán Reinoso aprendió de los errores que se cometieron en la guerrilla de 1965, el Sendero de hoy necesariamente tiene que haber aprendido de los errores en que incurrió el propio Guzmán.Independiente de todo ello, veamos: ¿Qué es lo que está pasando actualmente en el dominio militar en la zona del VRAE? A manerade antecedente recordemos que en octubre de 2006 el ministro de Defensa Allan Wagner Tizón, presentó ante la Comisión de Defensa del Congreso de la República su Plan de Acción del Sector, el cual tenía tres vigas maestras: Remuneraciones de las Fuerzas Armadas, el Núcleo Básico Eficaz y el Plan VRAE. Luego, en noviembre de ese mismo año, expuso ante el Consejo de Ministros el Plan “Una opción de Paz y Desarrollo en Seguridad en el VRAE”. En diciembre de 2006 el Poder Ejecutivo aprobó dicho plan, fijando una partida presupuestaria de 400 millones de nuevos soles para un lapso de cinco años.Aprobado el Plan VRAE y su respectivo presupuesto, el ministro de Defensa Allan Wagner consideró que con este instrumento el Estado ya disponía de un plan integral, y por tanto anunció, optimistamente, que al concluir la administración del presidente García en el 2011, la amenaza del VRAE habría desaparecido. Lamentablemente ese buen deseo resultó una ilusión, pues después de más de dos años y medio no funciona adecuadamente el Plan VRAE, y será muy dificil cumplir con esa meta en el 2011. Su sucesor en dicho portafolio, a partir del 20 de diciembre de 2007, el abogado Antero Flores-Aráoz, continuó con la misma línea política de su antecesor, y es durante su gestión en que se han producido los más duros reveses operacionales contra el Ejército Peruano en su lucha contra las redes terroristas. Hoy el nuevo ministro de Defensa, Rafael Rey Rey, tiene un reto muy dificil por cumplir. ¿Lo cumplirá?En este contexto –según hemos señalado párrafos ut supra– se crea el Comando Especial VRAE a la cabeza del cual está el general de brigada EP Raymundo Flores Cárdenas. El general Flores da inicio el 30 de agosto de 2008 a la “Operación Excelencia 777". Posteriormente se crea dentro de la estructura del Ejército Peruano la Región Militar VRAE (RMV) bajo el comando del general de división EP Ricardo Moncada Novoa, cuyo segundo comandante a partir de junio de 2009, es el general de brigada EP Benigno Cabrera Pino, de reconocida trayectoria por su participación en la Operación Militar “Chavín de Huantar”, a raíz de la cual fue ascendido en abril de 1997 al grado de general de brigada.
En armonía con los lineamientos políticos contenidos en el Plan de Desarrollo del VRAE, la estrategia militar fue concebida para ser desarrollada en cinco años y mediante la ejecución de tres fases: Implementación, Intensificación de las Operaciones y Consolidación.Es en el marco de la primera fase (Implementación), que se lanzó la “Operación Excelencia 777", para desalojar a Sendero Luminoso de la zona de Vizcatán. Ahora vendría la fase de Intensificación, según lo anunció el jefe del Comando Conjunto general Francisco Contreras Rivas, ya que esa será una prioridad para el año 2009, por constituir la fase más importante de la estrategia militar.Ahora bien, ¿en qué está fallando la estrategia militar? ¿Por qué estos reveses operacionales? ¿La estructura organizacional de las fuerzas militares y la doctrina que utilizan en sus operaciones es la correcta en el VRAE?No me cansaré de repetir hasta la saciedad que la estrategia militar está fallando debido a que el conductor militar no entiende el tipo de guerra que viene desarrollando la red terrorista Sendero Luminoso contra el Estado peruano. En primer lugar (según ya lo hemos precisado párrafos ut supra), se debe comprender que estamos frente a un enemigo que es un actor no estatal interno y asimétrico, el cual opera en conjunción con otras redes formando coaliciones. En segundo lugar (también lo hemos precisado), estas redes muy hábilmente ejecutan la guerra asimétrica como variable principal de la Guerra de Cuarta Generación (4GW) a sabiendas que se enfrentarán contra fuerzas militares simétricas que están organizadas doctrinaria y operacionalmente para desarrollar la Guerra de Tercera Generación (3GW).Ahora explicaré, con mayor detalle, por qué razones tanto la Región Militar VRAE (RMV) como el Comando Especial VRAE tienen una estructura organizacional simétrica que corresponde a una fuerza convencional, y con esa configuración organizativa se vienen enfrentando a redes y coaliciones asimétricas. En efecto, sus estados mayores y la fuerza operativa con sus órganos y medios de apoyo logísticos funcionan estando a la clásica organizaciónadoptada tradicionalmente para guerra externa entre Estados, que por antonomasia es de naturaleza simétrica y en que la fase imperante es la Guerra de Tercera Generación (3GW). Asimismo, la doctrina vigente para el desarrollo de las operaciones militares es igualmente propia de esta clase de guerra, y por tanto está desfasada con respecto a la vigente.Es por ello que al enfrentarse con esa estrategia militar en el VRAE –con una estructura organizacional, doctrinaria y operativa que obedece a los lineamientos correspondientes a la Guerra de Tercera Generación (3GW) propios para una guerra externa–contra enemigos que operan con esquemas de la Guerra de Cuarta Generación (4GW), en su calidad de actores no estatales internos, se yerra en la fijación de los objetivos y en-los procedimientos empleados. En esta última fase de la guerra el objetivo no es la conquista de posiciones, como por ejemplo la efectuada en Vizcatán, porque no definirá de modo alguno que el enemigo ya está derrotado.En la Guerra de Cuarta Generación (4GW) se debe buscar ganar la mente y los corazones de la población con la presencia activa de un Estado que emprenda obras de desarrollo a fin de quitarle a las redes terroristas cualquier forma de respaldo. La militarización del conflicto es un error. No se puede orientar todo al sector militar.Salvaguardando las distancias y diferencias, y a guisa de comentario, señalaré cómo es que el teniente general U.S. Army David H. Petraeus, conocido como un gran conductor militar desde que el Pentágono lo designara para comandar las fuerzas norteamericanas y de la coalición en una etapa de la impopular guerra en Irak, logró demostrar que es factible combatir y enfrentar a una insurgencia que practica la guerra de Cuarta Generación (4GW) protegiendo fundamentalmente a la población, ganando su adhesión y apoyo. De acuerdo a esta lógica, lo más importante es lograr la confianza de la población, a fin de conseguir que los líderes locales y ciudadanos más caracterizados en cada comunidad o asentamiento poblacional se enfrenten políticamente contra los grupos radicales y extremistas. Eso hay que tenerlo presente como una enseñanza para el caso peruano.
Esta acertada política de comando de aproximación a la población, y el empleo, como doctrina, del Manual de Contrainsurgencia que fuera publicado en el 2007 (U.S. Army Counterinsurgency Handbook Departament of Defense Foreword by Lt. Gen. David H. Petraeus, U.S. Army an Lt. Gen. James F. Amos U.S. Marine Corp. 2007), han sido las dos vigas maestras para manejar la situación de crisis en la guerra contra Irak. Allí, con mucha habilidad el comandante le da un enfoque esencialmente no militar a la presencia y permanencia de las tropas norteamericanas. Esto, tanto en Irak como en Afganistán, lugar éste donde incluso los talibanes discuten extensamente la 4GW en una página web de Al-Qaeda. En efecto, en enero de 2002, Ubed al-Qurashi citó dos artículos de la revista Marine Corps Gazette sobre el tema de la 4GW donde sostienen que ya ha tomado lugar la cuarta generación de guerra y ha revelado la superioridad del partido teóricamente débil. La estructura organizacional y una doctrina acorde a la naturaleza de las amenazas, son los dos ejes sobre los cuales se deben desarrollar las operaciones frente a los actores no estatales internos que practican la 4GW.
Seis días después de ocurrida la terrible emboscada de Sanabamba, el general Francisco Contreras Rivas, en su calidad de jefe del Comando Conjunto de las Fuerzas Armadas –y como tal, responsable de las operaciones militares en el VRAE– formuló declaraciones al diario La República (15 de abril de 2009) en que puntualizó la situación actual de las actividades de inteligencia en dicha zona del país, reconociendo que “la inteligencia todavía es muy limitada, no es satisfactoria para el campo de las operaciones”.En criterio del general Contreras se “necesita mayor inteligencia en la parte técnica y humana”. Sostiene, asimismo, que las Fuerzas Armadas “tienen inteligencia técnica, pero no está actualizada al 2009". Se consuela afirmando que pronto la van a tener porque “del presupuesto de 30 millones de soles asignados, 20 millones son para adquirir los equipos `Flif , que es una cámara infrarroja que se coloca en un avión y que penetra el follaje de los árboles y permite ver debajo de ellos”. Igualmente, sostiene que también habrá dinero para “formar una compañía de inteligencia que incluya la compra de un avión no tripulado, que capta en tiempo real la zona de combatesin peligro de muerte de la tripulación”, para luego agregar que “lo que tenemos es radiogonometría y radiointerceptación”.
Al ser preguntado con relación a la inteligencia humana, el general Contreras fue muy directo en su respuesta. “Estamos trabajando para ponerla en un 100% porque de 1 a 100 estamos en un 40% y esto se debe a que fue desarticulada a partir del año 2001, porque desapareció el Arma de Inteligencia en el Ejército (Mi comentario: por obra y gracia del ministro de Defensa toledista, David Waisman, y del general Víctor Bustamante Reátegui, quienes miopemente la desactivaron por móviles ajenos a criterios técnicos) y en los combates en tierra, quien lleva el esfuerzo principal es el Ejército. Estamos volviendo a infiltrar a los miembros de inteligencia en la zona. Infiltrar a un hombre, volverlo a tener con los mismos modismos que los terroristas, toma 5 años, estamos caminando a alcanzar el 100%, pero falta”.Posteriormente, en otras declaraciones el general Contreras Rivas explicó que la estrategia del Comando Conjunto de las Fuerzas Armadas tiene dos niveles:En primer lugar, el trabajo de inteligencia que consiste en la infiltración de las redes terroristas con miras a capturar a sus cabecillas y mandos medios. Consideramos que ese objetivo es muy dificil, por no decir imposible, ya que Sendero Luminoso de hoy es un partido de cuadros muy cerrados que impide la penetración, pues todos se conocen entre sí.En segundo lugar, el control territorial por fuerzas convencionales móviles que deberán tomar posiciones claves que antes estaban en manos de la subversión. ¿Por qué este último objetivo? Según el general Contreras los senderistas del VRAE por varios años se dedicaron a organizar sus estructuras de defensa en un terreno que es bastante hostil, al extremo de contar, actualmente, con guaridas subterráneas similares a las que tenían los guerrilleros en el Vietnam. Aquí se yerra igualmente en el objetivo, pues en la Guerra de Cuarta Generación (4GW) el objetivo no es la conquista de posiciones, según lo hemos explicado.
Continuando con el relato, el 29 de abril de 2009 el jefe del Comando Conjunto, general Francisco Contreras Rivas, a bordo de un helicóptero MI-17 de la Fuerza Aérea del Perú, fue a inspeccionar las bases contrasubversivas del cerro Vizcatán, la Compañía de Comando Lince –ubicada en la zona baja, margen derecha del río Mantaro– y la base del cerro Judas, con la finalidad de constatar personalmente en el terreno las condiciones de sus instalaciones y la situación del personal que ocupaba las mismas. Todas estas bases están muy cerca la una de la otra.Después de verificar el general Contreras las condiciones de la base del cerro Judas, acompañado de una comitiva y dos periodistas, abordaron el helicóptero para dirigirse a la base de Pichari, a fin de recargar combustible y luego continuar a Sanabamba. Es en esas circunstancias y siendo las 13:30 horas, que de pronto se sintió primero una explosión, y, luego, un remezón de la nave. Más tarde se escucharon los gritos de “¡Al piso!” de parte de algún oficial. Acto seguido se produjo otra nueva explosión, y en la parte externa del helicóptero sólo se escuchaban disparos de fusiles. Todo ello ocurrió en muy pocos segundos.
Estando a ello, el piloto del helicóptero reaccionó muy rápidamente, e inició un ascenso de la nave. No hubo ninguna víctima, y todo no pasó de un hostigamiento contra la base, aprovechando de la presencia de un helicóptero. Luego de las averiguaciones del caso, se determinó que de la parte alta del cerro Judas unos elementos terroristas encubiertos en la espesura hicieron los dos disparos con lanzacohetes RPG. Los disparos de fusiles Galil fueron realizados por el personal militar de la base, para posibilitar la salida del helicóptero.Encontrándose en Pichari, el general Contreras recibió una llamada satelital, procedente de la base del cerro Judas. Era el mayor EP Fidel Bocanegra Burga, quien daba parte del hallazgo de los restos de los cohetes que fueron lanzados a una distancia de entre 10 y 15 metros de donde estuvo el MI-17. Se confirmó que se trataba de municiones que correspondían a un lanzacohetes RPG. Las fallas en los disparos se debieron posiblemente a la distancia entre el tirador y la nave (más de 200 metros).
El ex ministro de Defensa y ex comandante general del Ejército, general Roberto Chiabra León, atribuyó ese hecho a un exceso de confianza y a la falta de medidas de precaución. En su criterio, lo correcto hubiera sido que salieran dos helicópteros –uno que fuera adelante y el otro que hiciera sombra y protegiera al primero– a hacer el recorrido de las bases militares destinado a solucionar las necesidades y carencias de que adolecen los oficiales y los soldados acantonados en el lugar inspeccionado por el general Contreras. Es por eso que el general Chiabra, con gran acierto, advierte que “no está funcionando la estrategia operacional que se viene aplicando en el VRAE, y que además hay un problema de inteligencia táctica que no ha sido superado hasta el momento”.
En cuanto al asalto perpetrado por un comando operativo terrorista la noche del 1 de agosto de 2009, contra la base policial de la Dirección de Operaciones Especiales ubicada en el poblado de San José de Secce, que fuera frustrado por la rápida y enérgica reacción del personal policial atacado, si bien ya nos hemos ocupado de esa operación, ahora en línea de precisión formularemos –con respecto a la misma– algunos comentarios adicionales teniendo en cuenta el relato cronológico y análisis que venimos efectuando de las acciones letales y espectaculares acaecidas en lo que va del año 2009.Los atentados senderistas se multiplican en el VRAE sin que los aparatos de inteligencia logren penetrar las filas enemigas.En efecto, después del ataque a la base policial de San José de Secse se hizo la reconstrucción del guión de asalto. A través de esta reconstrucción se ha podido conocer que los planificadores terroristas habían previsto perpetrar su operación la medianoche del lunes 27 o del martes 28 de julio de 2009, pues buscaban sacar ventaja en el hecho de que la población de San José de Secce —conforme era una tradición es esas fechas— participaría en dos corridas de toros y en dos fiestas populares. Pero estas actividades se suspendieron debido a que eran públicas y masivas y podían contribuir a la propagación de la influenza AH1N1.
Conforme a ello, en un primer momento se frustró la operación de asalto a la base policial, por lo que entró en ejecución el plan de contingencia, plan que contemplaba como fecha alternativa para el ataque el sábado 1 de agosto de 2009. Ese día podía aprovecharse la realización de una gran feria distrital y la práctica de la antigua herranza de animales, en la que cada familia marca su ganado y posteriormente procede a organizar reuniones con el propósito de celebrar dicho evento, situación que finalmente se dio.
Resulta evidente que las integrantes del comando operativo han ingresado a San José de Secce por el método de infiltración, para evitar ser detectados. Y, desde luego, han aprovechado la situación que se vivía en la población, la cual estaba enfrascada en realizar las actividades referidas, para no despertar sospecha alguna. Además jugó a su favor el hecho de que la base policial no contaba con ningún elemento de inteligencia encubierto en la parte externa y dentro de la población. Es así que los terroristas pudieron estudiar las rutas de ingreso, la llegada de extraños, los desplazamientos sospechosos, el chequeo indirecto de bultos o paquetes inusuales que transportarían los niños, que son quienes llevan el armamento, munición y explosivos para cualquier operación terrorista, pues son inimputables y generalmente pasan desapercibidos.También es evidente que han contado con el apoyo de algunos pobladores de San José de Secce para tener un punto de caída seguro antes de la operación. En todo caso se han instalado días previos en inmuebles desocupados que utilizaron como casas de seguridad, o casas francas, y desde allí operar e infiltrarse camufladamente con la misma indumentaria entre la población.Recordemos que San José de Secce es la capital del distrito de Santillana, en la provincia de Huanta. Allí está actualmente centralizada toda la actividad comercial, agrícola y ganadera. Está en la fecha habitada por aproximadamente 2 000 personas, que conforman alrededor de 400 familias, de modo que las posibilidades de infiltrarse sin ser detectados, eran amplias.Como antecedente tenemos que la red terrorista Sendero Luminoso ingresó por primera vez a San José de Secce en 1982. En ese entonces incendiaron el puesto policial, el local de la municipalidad y la oficina de registro civil. Posteriormente se formó allí uno de los primeros comités de autodefensa de Ayacucho, bajo el liderazgo de Faustino Figueroa Pariona.Esa noche infernal del 1 de agosto de 2009 el ataque empezó a las 23:30 horas. San José de Secce fue tomado abiertamente por el comando operativo terrorista, aprovechando que la gran mayoría de la población estaba pernoctando en sus viviendas luego de la herranza, mientras otras permanecían aún en las chacras. En ese escenario se dio inicio a la operación de asalto cuando, un equipo de ataque, como una parte del plan, hizo un forado en la pared del Colegio San José Santos Figueroa, en tanto otros cuatro equipos realizaban un ataque frontal por las cuatro esquinas que tiene el parque ubicado frente a la base policial, con el propósito de concentrar el fuego por esa dirección de aproximación.Diseñado así el ataque, durante el desarrollo de la operación otro equipo logró perforar el muro de adobe para inmediatamente ingresar, con la ayuda de una escalera, al local de la Municipalidad de Santillana, que está ubicado al costado de la base policial. Sin embargo, no calcularon la rápida reacción del personal policial que logró frustrar la toma de la base por el comando operativo terrorista.
La operación fue concebida por los planificadores con el evidente objetivo de ingresar al interior de la base por la parte posterior de la instalación atacada, mientras con el fuego de los cuatro equipos que atacaban por la parte frontal, utilizando las paredes como parapeto, fijaban a su objetivo desde el parque. Se trataba de encajonarlos y no dejarlos salir para luego tomar así el local a fin de apoderarse del armamento.Tanto los planificadores terroristas como el comandante de la operación, pese al buen plan de ataque que concibieron y ejecutaron, no se imaginaron —teniendo el factor sorpresa a su favor— que el plan de seguridad de la instalación funcionaría y que el personal policial recuperaría la iniciativa por su rápida reacción logrando neutralizar el ataque y frustrando la operación de asalto con un lamentable saldo de tres policías y dos civiles muertos durante el enfrentamiento.Esta ocasión no fue la clásica emboscada a una patrulla militar o policial, en el cotidiano hostigamiento a bases contraterroristas del Ejército en la zona del VRAE. Esta vez fue un ataque a una base policial fuerte, especializada en la lucha contrasubversiva. Ningún ataque anterior —ni el de la Comisaría de Acobamba— ha tenido la dimensión y la magnitud de este último. Ese hecho demuestra que tienen una capacidad militar importante como para realizar una operación de esa envergadura. No fueron narcotraficantes o sus sicarios, no son abigeos ni mucho menos pandilleros quienes realizaron la operación. De ello no cabe la menor duda.Después de que el Servicio de Inteligencia Nacional lograra la capitulación de Abimael Guzmán Reinoso, así como la de Elena Albertina Iparraguirre Revoredo, se produjo la división o escisión de su organización, la ruptura orgánica de esta red terrorista en dos bloques antagónicos entre sí. Uno de ellos, el bloque escisionista Proseguir —después de la captura de Oscar Ramírez Durand (a) “Feliciano” en julio de 1999— a su vez se subdividió en dos redes o facciones, por lo que en el Sendero Luminoso de hoy coexisten tres redes terroristas claramente diferenciadas con sus propias estrategias que se conocen como:
• La primera, “Solución Política a los problemas derivados de la guerra”. Dicha red se encuentra dirigida por el propio Abimael Guzmán Reinoso y Elena Albertina Iparraguirre Revoredo. Guzmán e Iparraguirre conforman el comité permanente histórico de Sendero Luminoso y aglutinan alrededor de ellos aproximadamente al 70% de los cuadros que primigeniamente formaron parte de la organización desde ILA 80, quienes han logrado adaptarse a los nuevos cambios, a las nuevas condiciones y escenarios que se dan en todo proceso, desarrollando nuevas formas de lucha.De este porcentaje mayoritario muchos han logrado salir en libertad (entre el 2001 al 2009) para seguir desarrollando la Guerra Revolucionaria (GR) dentro del nuevo esquema estratégico de “pasar de tiempos de guerra a tiempos de paz” —lo cual no significa claudicar o tener que dejar de luchar— cambiando las formas de lucha en que, por ahora, la Ofensiva Legal (OL), la Guerra Política (GP) y el Accionar de los Organismos de Fachada (AOF), son los tres componentes no militares que vienen privilegiando en su confrontación como actores no estatales internos asimétricos contra el Estado peruano.Este sector considera que han logrado superar la “etapa de la inflexión” después del largo periodo posterior que Sendero Luminoso tuvo que afrontar luego de la captura de su líder, de la mayoría de los miembros del comité central y de la clandestinidad de muchos de sus cuadros. Ello será hasta encontrar mejores condiciones a fin de superar el “recodo del camino” (como dijera Guzmán) dando “saltos, avances y éxitos”. Vale decir, se preparan para reiniciar la lucha armada, pues consideran que la unidad de su partido les demanda continuar con la guerra popular estableciendo nuevos planes para desarrollarla. ¿Cuándo? ¿Cómo? ¿Dónde? Pronto lo sabremos.Han transcurrido 17 años de la captura de Abimael Guzmán Reinoso, sin embargo podemos constatar que Sendero Luminoso nunca estuvo paralizado, ya que durante ese tiempo han continuado desarrollando la Guerra Política en “nuevas y complejas situaciones” con el objetivo de poder acumular fuerzas a fin de seguir con la guerra popular, claro está, sin la presencia y conducción de Guzmán, pero en función de su “pensamiento guía”.Conforme a ello, todo indica que Sendero Luminoso —en la hora actual— se encuentra preparando la realización de su segundo congreso partidario con los cuadros que tiene actualmente en libertad y con aquellos que se mantuvieron en la clandestinidad para que en dicho evento —que es la expresión de la voluntad partidaria— se legitime a una nueva dirección y estructura del partido, poniendo así el punto final al período de inflexión y dando inicio a las operaciones después de la reconstitución partidaria, sin la presencia y dirección de Abimael Guzmán Reinoso, pero bajo los lineamientos doctrinarios del “pensamiento Gonzalo”.
• La segunda, conocida como “Solución Política global con lucha armada”. Esta red opera en la zona del Huallaga conformando el Comité Regional del Huallaga. Dicho comité está dirigido por José Flores León (a) “Artemio”, que si bien aceptó la autoridad de Guzmán y por ende la nueva estrategia propugnada por él (Solución política a los problemas derivados de la guerra), su accionar se ve limitado y entrampado en un área geográfica donde el factor imperante es la fuerza. La red de Guzmán conoce a los integrantes de esta facción como “línea militar burguesa”, la misma que se mantuvo inactiva en cuanto acciones terroristas del 2001 al 2004.Es recién a partir del año 2004 que “Artemio” cambia de actitud, y por ello a mediados de ese año esta red reinicia sus acciones terroristas utilizando la metodología de agitación y propaganda combinada con emboscadas y sabotajes. Plantea la consigna “solución política global con lucha armada”, lo cual deberíamos comprender como que el Estado peruano tiene que negociar, a fin de lograr una solución política al problema de la violencia en el país. La solución política es una amnistía en la cual se incluya a lo que denominan “presos políticos” y “prisioneros de guerra”.Cabe señalar que “Artemio” siempre ha sido un seguidor de Abimael Guzmán Reinoso, a quien aún considera como “presidente Gonzalo” y “pensamiento guía” en el partido. Ha mantenido con Guzmán siempre buenas relaciones, y tan cierto es esto que Guzmán nunca me hizo una sola referencia negativa de “Artemio”, al cual considera como “un buen camarada”. A ello se debe sumar el hecho que “Artemio” aceptó la estrategia de “solución política a los problemas derivados de la guerra” propugnada por Guzmán, y posteriormente se mantuvo inactivo en cuanto a acciones terroristas en el período 2001 al 2004, para luego reiniciarlas esporádicamente recién a mediados de este último año.Todos estos elementos analizados conjuntamente, nos permitirían determinar, como una hipótesis de posibilidad, que la red de “Artemio” podría ser el brazo armado de Guzmán en el Alto Huallaga pararealizar maniobras de distracción en esa zona del país, a fin de que el Estado fije toda su atención en dicha área, y Sendero Luminoso tenga libertad de acción en el resto del país para desarrollar la guerra revolucionaria (GR).El Comité Regional del Huallaga, a diferencia de la red que opera en el VRAE, ha sufrido bajas de cuadros muy importantes en los últimos años. Así tenemos que el 19 de febrero de 2006 falleció en un enfrentamiento con fuerzas policiales Héctor Aponte Sinarahua (a) “Clay”, importante mando militar. Posteriormente el 27 de noviembre de 2007, cayó abatido Mario Espíritu Acosta (a) “JL”, y ese mismo día fue detenido Richard Cahuana Yuyali (a) “Julián”, ideólogo del Comité Regional del Huallaga. Asimismo, con fecha 21 de mayo de 2008 el Ejército Peruano mediante un comunicado oficial informó que en un enfrentamiento había fallecido Juan Laguna Domínguez (a) “Piero”.Como consecuencia de la “Operación Victoria IV-2009" ejecutada por personal combinado de diversas entidades de la Policía Nacional del Perú en el frente policial Huallaga, operación que se iniciara el 16 de julio de 2009 y que concluyera casi tres días después, se dio un importante golpe contra esta red ubicándose documentos de “Artemio” en una de sus bases de operaciones en el valle Yanaj anca, en el distrito de Cholón, provincia de Marañón, región Huánuco. Luego de esta operación, al parecer “Artemio” se había replegado a las alturas de Yanajanca con un pequeño contingente.
• El tercero es el bloque escisionista “Proseguir la lucha armada” o los “remanentes del Felicianismo”. Esta red opera en el Comité Central Regional Principal del Centro ubicado en el VRAE. Dicha red se encuentra liderada por Víctor Quispe Palomino (a) “José” y por Leonardo Huamaní Zúñiga (a) “Alipio”, quienes consideran a Guzmán Reinoso como un capitulador y un traidor.Como un punto de partida de la segunda fase de esta red terrorista podemos considerar el 14 de julio de 1999, fecha en la que una patrulla del Ejército Peruano al mando del capitán Miguel Valdeavellano Vento, capturó a Oscar Ramírez Durand (a) “Feliciano” y a partir de ese momento se origina un vacío en el bloque escisionista Proseguir que estaba por la continuación de la guerra. Este hecho produce una recomposición interna y en línea de sucesión quedaron como nuevos cabecillas Víctor Quispe Palomino (a) “José” y Leonardo Huamaní Zúñiga (a) “Alipio”.Es el 2003 que esta red, que ya se había desligado del Comité Central de Sendero Luminoso, usando el nombre de Partido Comunista del Perú, bajo el comando de “José”, reaparece en el escenario nacional con un golpe espectacular secuestrando a 71 trabajadores de la empresa Techint, encargada de instalar los duetos del gas de Camisea. En ese mismo año, antes de Fiestas Patrias, un comando operativo senderista sustrajo un equipo de radio a una distraída patrulla militar, y con ese equipo enviaron su primer mensaje por radio en el que anunciaban la continuación de la lucha armada en el país.Luego, tres años después –de aparente inactividad– con fecha 17 de mayo de 2006, emiten su primer documento al que llamaron “Programa Revolucionario General del Perú”, donde se definieron como un partido comunista que se fundamenta y guía por el marxismo-leninismo-maoísmo, principalmente el maoísmo aplicado a las condiciones específicas de la Revolución Peruana, al estilo propiamente peruano, dejando de lado al denominado “pensamiento Gonzalo”, la línea ideológica de Abimael Guzmán Reinoso.
En este documento el llamado “Partido Comunista del Perú, Marxista-LeninistaMaoísta”, como parte integrante del Movimiento Internacional, asume y propone los siguientes principios básicos:– La ley de la contradicción en todas las cosas particularmente en la lucha de clases, es la ley esencial del materialismo dialéctico, una ley universal del movimiento de los contrarios en la incesante transformación de la sociedad, la naturaleza y el pensamiento.– Las masas son la verdadera muralla de hierro, y son las que hacen la historia mundial y; la rebelión proletaria y popular se justifican
.– En la lucha de clases, dictadura democrática popular, dictadura del proletariado e internacionalismo proletario.
– El Partido Comunista Marxista-Leninista-Maoísta, aplica correctamente la independencia y autodecisión relativa, en el Frente Unido Democrático Revolucionario.
– Combatir indesligablemente, al Imperialismo principalmente yanqui, a la reacción mundial y al revisionismo de todo tipo.
– Conquistar, defender y consolidar el poder del pueblo y del proletariado con Guerra Popular democrática hasta adentramos todos o nadie en el comunismo.
– Militarización del partido y la construcción concéntrica de los tres instrumentos de la revolución en medio de la Guerra Popular Democrática.
– Selección y consolidación del Partido Comunista, principalmente en medio de su militarización, teniendo como peligro principal al revisionismo de todo tipo.
– Transformación ideológica y política constante a la par del desarrollo de la práctica revolucionaria que avanza y cambia incesantemente.
– Servir a la clase, al pueblo y a la Revolución Proletaria Mundial.
– Lucha con desinterés absoluto, con justa y correcta teoría revolucionaria y estilo revolucionario; superar todas las dificultades y defectos en la Guerra Popular Democrática Prolongada, uniéndonos de verdad con las masas básicas de obreros y campesinos, la intelectualidad, estudiantes, comerciantes, transportistas, industriales nacionales y extranjeros, campesinado rico, mujeres, jóvenes, ancianos y niños, y con quienes tienen espíritu nacionalista y antiimperialista de palabra y confirmen sus hechos.
Igualmente, señalan, con toda claridad, que dicho partido tiene como objetivo final el comunismo en el Perú, tipificando a la sociedad peruana como colonial, semicolonial y semifeudal, un país atrasado y subdesarrollado, un país del tercer mundo.Para lograr su objetivo refieren que el “Partido Comunista del Perú, Marxista-Leninista-Maoísta”, dirige una Guerra Popular, desarrollando una Revolución Democrática Nacional Burguesa de Nuevo tipo que tiene como meta conquistar el poder para la clase trabajadora y el pueblo en todo el país, enarbolando los siguientes objetivos políticos, como Programa de la Revolución Democrática Nacional:
PROGRAMA DE LA REVOLUCIÓN DEMOCRÁTICA NACIONAL
1. Conquistar el poder, el Estado de grandes burgueses y grandes terratenientes feudales; dictadura reaccionaria de los explotadores y opresores, que tienen como principal componente y columna vertebral a las Fuerzas Armadas y Policía Nacional del Perú, fuerzas antipopulares, vendepatrias y represivas que lo sustentan, y a todo su aparato burocrático. Conquistar el poder aniquilando y desintegrando a su columna vertebral.
2. Emancipar a la nación, de la opresión y explotación externa imperialista, principalmente norteamericana. Sin derrocar la dominación del imperialismo principalmente yanqui, es imposible emancipar a la nación peruana.
3. Nuestra política para con los capitulacionistas, entreguistas y vendepatrias de la gran burguesía y los grandes terratenientes feudales que combaten a la revolución, junto a su amo el imperialismo principalmente yanqui es tratarlos como a enemigos y derribarlos resueltamente.
4. Nuestra política, respecto a los recalcitrantes de la gran burguesía y los grandes terratenientes feudales que dependen de distintas potencias imperialistas, incluso respecto a la gran burguesía y grandes terratenientes feudales pronorteamericanos que no combaten a la revolución; es adoptar una doble política revolucionaria; por un lado aliarnos con ellos en un Frente Unido Democrático Revolucionario contra el imperialismo principalmente yanqui, y por el otro, luchar adecuadamente cuando aplican la política de represión y socavamiento al Partido Comunista para hacer fracasar el Frente Unido y así pretender que los frutos de la revolución caiga en sus manos.
5, Terminar con la opresión interna del país, de los grandes terratenientes feudales. El imperialismo principalmente yanqui es el principal sostén de la clase terrateniente feudal, cuya existencia y desarrollo dependen de él, y, ésta es la principal base social de la dominación imperialista yanqui. Por tanto, sin acabar y derrocar la dominación del imperialismo principalmente yanqui no es posible acabar con la opresión interna de la clase terrateniente feudal.
6. Todas las empresas pertenecientes a peruanos o extranjeros principalmente norteamericanos, que sean de carácter transnacional monopolista, tales como bancos, propiedades, la deuda externa, serán confiscados y pasarán a ser administrados por el Estado naciente, con el fin de que el capital privado no pueda dominar la vida material del pueblo.
7. Aplicar la política de la tierra para quien la trabaja, confiscando, repartiendo y garantizando tierras al campesinado principalmente pobre, y estas sean propiedades principalmente de grandes terratenientes feudales; mientras con los medianos y pequeños terratenientes y campesinos ricos hacer ayudas mutuas, concesiones positivas y no negativas bajo la política de independencia y autodecisión relativa en el Frente Unido Democrático Revolucionario, en beneficio de la revolución.
8. Respetar las propiedades y derechos de la burguesía nacional, de los industriales, comerciantes; en las zapaterías, textiles, pesqueros, mineros, transportistas (marítimos, aéreos, fluviales, terrestres, de pasajeros, de carga), farmacéuticos, industriales nacionales y extranjeros oprimidos y constreñidos por el imperialismo principalmente norteamericano y por el Estado peruano.
9. Desarrollar la Revolución Democrática Nacional con Guerra Popular democrática por la instauración de la República Popular del Perú, e ir plasmándolo en la práctica las políticas de nueva economía, nueva política y nueva cultura.
10. Desarrollar la Guerra Popular de Nueva Democracia, que, mediante un Ejército Revolucionario bajo la dirección del Partido Comunista conquiste el Poder en todo el país, aniquilando y desintegrando las Fuerzas Armadas y Policía Nacional del Perú, en el que se respete la vida de los heridos y prisioneros de guerra, tanto de oficiales, suboficiales, técnicos y en especial del personal de tropa.
11. Para defender de toda agresión reaccionaria imperialista principalmente yanqui, culminar la formación de la nación peruana, respetando y defendiendo los derechos e intereses de las minorías nacionales: (Quechuas, Aymaras, Ashaninkas, Macheguengas, Anueshas, Piras, Chamas, Shipibos, Aguarunas, Conivos, Amehuacas, Huambisas, Cashibos, Cocamas, Huitotos y otros).
12. Servir al desarrollo del proletariado peruano corno parte de la clase obrera internacional, servir a la constitución, reconstitución y consolidación de los partidos comunistas y a su unificación en el siempre vivo Movimiento Comunista internacional guiados por el Marxismo- Leninismo-Maoísmo, todo en función a que el proletariado cumpla con su misión histórica como última clase auténticamente revolucionaria.
13. Defender las libertades, derechos, beneficios y conquistas que la clase obrera, el campesinado, los intelectuales, estudiantes, trabajadores, industriales nacionales y masas en general, han logrado a costa de sus propias luchas, reconociéndoles y garantizándolos su vigencia en una declaración de derechos del pueblo.
14. Respetar las libertades de conciencia religiosa, en su cabal plenitud, tanto de creer como de no creer.
15. A nivel nacional, regional, zonal, local, incluido el de las minorías nacionales; respetar las costumbres, sus culturas, idiomas, raza, sus fiestas religiosas, fiestas costumbristas, arte, pintura, música, teatro, deportes y otras actividades que realcen la alegría y educación de la clase y el pueblo.
16. Controlar, racionalizar y defenderlos a la clase y al pueblo de toda disposición lesiva y de cualquier forma de trabajo gratuito o carga personal y de los agobiantes impuestos que recaen sobre las masas.
17. Real emancipación e igualdad para la mujer; un futuro mejor para la juventud, protección para la madre y la niñez, respeto y apoyo para la ancianidad.
18. Una nueva cultura, como una política proletaria para desarrollar el nacionalismo y el antiimperialismo; el patriotismo y el internacionalismo proletario. Con este objetivo, dar importancia a la educación y que se guíe por la ideología del proletariado.
19. Apoyar las luchas, sean reivindicativas o armadas, movilizaciones o protestas del proletariado internacional, de las naciones oprimidas y de los pueblos del mundo; en especial a aquellas luchas contra la Superpotencia Hegemónica Única, contra las clases dominantes de los Estados Unidos, la oligarquía financiera burguesa estadounidense; contra las potencias imperialistas y el revisionismo de todo tipo, concibiendo la Revolución Peruana como parte de la Revolución Proletaria Mundial.
20. Apoyo moral a las luchas, movilizaciones, protestas, manifestaciones, pronunciamientos, etc., de los partidos políticos, grupos políticos, organizaciones sindicales y gremiales con sentido nacionalista y antiimperialista principalmente yanqui.
21. Luchar esforzadamente por el triunfo completo de la Revolución Democrática Nacional en todo el país, e inmediatamente desarrollar la Revolución Socialista para, junto al proletariado internacional, las naciones oprimidas y los pueblos del mundo y, las demás clases y capas sociales que apoyan y están convencidos de la transformación revolucionaria del capitalismo al socialismo, y a través de sucesivas revoluciones culturales, proseguir la marcha de la humanidad hacia su objetivo final, el comunismo.
Esta misma red terrorista en noviembre de 2008 emite un segundo documento bajo el título de “Balance de la Primera Contra Campaña Política y Militar de la Guerra Popular Democrática de Resistencia Nacional Antiimperialista Yanqui”, en que señala que la “Operación Excelencia 777" ejecutada en la zona del VRAE por el general Raymundo Flores Cárdenas, no ha dañado en absoluto a su organización y que en el 2009 seguirán en Vizcatán, y la Guerra Revolucionaria (GR) se expandirá a otros lugares del país.
El citado documento de 45 folios contiene un detallado balance de la denominada “Primera Contracampaña Política y Militar” que han desarrollado entre los meses de agosto y noviembre de 2008, con el objetivo de hacer frente a la incursión del personal militar perteneciente al Comando Especial del VRAE. En ese texto afirman que la estrategia desarrollada por las Fuerzas Armadas ha sido dizque un fracaso debido a que hasta ese momento ninguno de sus comandos operativos y planificadores ha sido abatido en combate o detenido.Con relación a la emboscada de Tintay Puncu, en Tayacaja, Huancavelica, acaecida el 9 de octubre de 2008, señalan que dicha operación: “Ha sido producto de un plan estudiado, planificado y preparado con anticipación (...) La emboscada fue por un error de rutina (...) Los verdaderos responsables son usted, don Raymundo (léase general Flores Cárdenas) y Luis Flores Cornejo (léase general Flores Cornejo) por dar órdenes a la patrulla. Hay que tener la capacidad de reconocer, por muy dura o amarga que sea la realidad que en Tintay Puncu han sufrido un revés” (sic).
Con respecto al general EP Raymundo Flores Cárdenas, por entonces, jefe del Comando Especial VRAE, el documento señala:“General Flores; su futuro es divorciarse más del pueblo y la nación peruana. En 28 años de guerra revolucionaria, muchos de su pelaje, sus semejantes y allegados, nos dieron varias veces partida de defunción; esos, hoy son cadáveres insepultos, mientras que la guerra revolucionaria, como usted mismo reconoce, ha crecido más. El 2009, seguiremos en Vizcatán, y la guerra revolucionaria se habrá expandido a otros lugares del país. Piense general, que en Vizcatánal hacer frente a la guerra revolucionaria, usted ha sido bienvenido y tiene su ley, porque se está comportando muy bien como furriel, y además, porque es un buen sepulturero, dedicándose eficazmente a cosechar muertos y heridos; lo demás es dar tiempo al tiempo para nuestro bien. El tiempo y el viento, avanzan y mudar a nuestro favor. Don Raymundo, mientras sea usted un militar activo y haga frente a una guerra revolucionaria, su historia siempre será tragar la pólvora de la derrota, y este es el futuro que les depara, a todos los militares recalcitrantes anticomunistas en el Perú y en el mundo.” (sic)
Con relación al general EP Luis Flores Cornejo, comandante general de la 31° Brigada de Infantería, el documento señala:“LUIS FLORES CORNEJO; General de la 31 Brigada de Infantería, un recalcitrante militar anticomunista y vendepatria, después de la emboscada en Tintay Puncu, en su impotencia y arrebato, como perro rabioso y babeante ladró:“Esta lacra miserable del narcoterrorismo no nos van amedrentar, son unos cobardes, unos pusilánimes, yo quisiera que me de la cara ahorita, ahorita que me de la cara, haber si son capaces de poder darme la cara, y lo hacen con uno cuerpo a cuerpo”, ladra; es hacer como en Pichis, asesinar a una familia que están en labores agrícolas en su choza y desarmados ¿Pusilánimes? Pusilánimes es falto de animo y audacia. Realizar una emboscada, en el que hay que llevarle de la jeta al enemigo y sin que se de cuenta...” (sic)
Respecto a José Flores León (a) “Artemio”, dirigente del Comité Regional del Huallaga señalan que:“La nación y el pueblo peruano, es seguro que se hacen la siguiente, ¿Por qué solo Artemio, en los últimos años es quien lanza sus alaridos? Es porque este revisionista, aún a duras penas se mantiene en armas, y es un guardadito del enemigo y el revisionismo, para usarlo en el momento conveniente como es ahora, para confundir y socavar al Partido y a la guerra revolucionaria. Artemio, porque está en armas, tiene aún cierta “cabida” para seguir embaucando y confundiendo al pueblo y a la nación peruana; en cambio, los demás con Gonzalo a la cabeza ya están entregados yfondeados y ya no tiene aforo porque ya no son “muy útiles” a la contrarrevolución” (sic)
Finalmente, el 9 de febrero de 2009 ha emitido un tercer documento, como un “comunicado del Comité Regional Principal del Centro PCP” cuyo contenido por ser de interés lo reproduzco ad literam:
“EL PRESIDENTE GONZALO” ES UN TRAIDOR Y UNA VERGÜENZA PARA EL PARTIDO
Comunicado del Comité Regional Principal del Centro del PCP.
Lunes 9 de febrero de 2009
Saludos camaradas militantes y combatientes del Ejercito Popular de Liberación del Comité Central Regional Principal del Centro del Partido Comunista del Perú; hoy más que nunca la moral comunista está hasta el tope llevando la vida en la punta de los dedos con más Guerra Popular combatiendo sin cesar a toda arremetida reaccionaria del estado caduco representado por el gobierno de turno del maldito fascista genocida Alan García Pérez.Es sabido la fracasada ofensiva militar (con bombardeos, desplazamiento y genocidio contra la población, tala indiscriminada y desinformación) de las fuerzas reaccionarias ante todo intento de tomar los territorios conquistados por el partido en el mal llamado “VRAE”, ante tales circunstancia el gobierno de turno ha promulgado una ley para formar la “región militar provisional del Vizcatán” que busca como fin suministrar la logística necesaria con un presupuesto autónomo, sin embargo ya se ha debelado la verdadera máscara del aprismo, que volviendo a sus viejas mañas, esta a la vista el genocidio y la corrupción. Ante tales circunstancias el partido ya ha tomado las medidas pertinentes y se avizora un periodo de guerra de guerrilla con constante desplazamiento dejando a un lado las zonas de seguridad, cambio de tácticas y métodos.Las acusaciones de la reacción —y las acciones así lo demuestran—ha sido en torno de que “Sendero está aliado con el narcotráfico”, “Sendero es un cartel más de la droga”, “la principal fuente de dinero para Sendero ha sido el narcotráfico”, etc., etc.; plumíferos como el agente de la CIA Jaime Antezana siempre ha dado entender eso con sus ya conocidas declaraciones; del aprismo ya se sabía lo que se venía. Desde aquí le hacemos recordar al genocida Alan García Pérez que el poder no dura para siempre y el Partido le va pasar la factura de todos sus crímenes cometidos. Con el argumento del “narcoterrorismo” el gobierno reaccionario de turno ha destinado un presupuesto que supera los cien millones de soles. Es tan grande su temor al Partido Comunista del Perú que como sea quiere exterminar a las masas de las bases de apoyo de aquella zona sin embargo el Partido ya está preparado para afrontar toda arremetida reaccionaria y desde aquí desmentimos toda acusación en torno de que el CCRPC ha “dejado la ideología por el narcotráfico”.Ante tales circunstancias ahora se ha oído por ahí cierta conferencia de prensa y comunicados a favor de la vida del “Presidente Gonzalo”, pues bien, reiteramos una vez más que el Presidente Gonzalo ya ha sido superado, y es un LOD (Línea Oportunista de derecha) más que ha devenido en vergüenza para el partido y toda declaración de sus abogados demuestra su total traición a la Guerra Popular —centro de la Línea Política General del Partido— Gonzalo ya no representa al Partido Comunista del Perú y exigimos que no se le use como carrito de batalla para justificar ciertas acciones ya superadas, los LOD en estos tiempos han sido derrotados y las condiciones objetivas y subjetivas así lo demuestra en la palestra con el total fracaso del capitalismo en todo el orbe, y dentro del Partido, con sus manotazos de ahogado de “solución política a los problemas derivados de la guerra”.En estos tiempos la verdadera problemática de todo partido comunista es la falta de verdaderos partidos comunistas que dirijan a las masas en guerra popular. En el Perú la problemática gira en torno a una nueva estructura organizativa para los tiempos de guerra popular y los métodos, medios y tácticos renovados que aglutinen a las masas en torno del partido, por ende, Gonzalo ha sido superado y desplazado, exigimos que sea fusilado o que se nos entregue para hacerle juicio popular y en menos de un día dictar la sentencia máxima aplicada a los traidores.¡Viva el Partido Comunista del Perú! ¡Viva la invencible Guerra Popular! ¡Viva el Ejército Popular de Liberación! ¡Muerte a los traidores y soplones!El 31 de mayo de 2009 el Canal 2 de televisión difundió un reportaje del programa “Punto Final”, que dirige Nicolás Lúcar. En ese reportaje el periodista Martín Arredondo entrevista a cara descubierta a Víctor Quispe Palomino (a) “José” en las alturas de Santo Domingo en Acobamba, en el departamento de Junín, y trata sobre diversos temas como la visión histórica que tiene Quispe de Sendero Luminoso. Él puntualmente señala que el 14 de julio de 1999 con la captura de Oscar Ramírez Durand (a) “Feliciano” se cierra una etapa y comienza otra en el bloque escisionista “Proseguir”, corriente que estaba por la continuación de la guerra en el país.Asimismo, Quispe Palomino narra lo que el llamó su biografía revolucionaria, asumiendo a sus padres como unos verdaderos revolucionarios, pero sus hermanas son “una vergüenza política”. Con relación al tema del narcotráfico, asegura que no lo defiende, pero trata a los campesinos involucrados en dicha actividad como “honestos trabajadores” quienes para subsistir, ante la ausencia y abandono del Estado, tienen que dedicarse al cultivo de coca, pues la infraestructura está totalmente desactivada, la agricultura abandonada, la salud pública no llega nunca a la zona y la educación no existe ni por asomo.El reportaje de “Punto Final” tiene la bondad de brindarnos abundantes imágenes para el análisis de este grupo. En el reportaje puede verse un campamento móvil del Comité Regional Principal del Centro del PCP donde militantes se entrenan en tácticas de combate y se preparan para sus próximas acciones. Lo más crudo del reportaje constituye la presentación de imágenes con niños portando fusiles y ametralladoras, formando militarmente y coreando lemas como “viva el marxismo-leninismo y la revolución proletaria”. Este hecho demuestra que los terroristas entrenan a niños para que asesinen, utilizando armamento militar.Ese suceso también confirmaría las informaciones que se tiene respecto a la utilización de menores de edad como escudos y fuerza de avanzada en sus operaciones. Esto con la finalidad de que las fuerzas del orden se frenen en los enfrentamientos, y no respondan ante el ataque de niños por el evidente temor que posteriormente sean juzgados por cometer crímenes de lesa humanidad en agravio de menores. Es decir, conocen cabalmente todas las argucias necesarias para enjuiciar a los militares en plena guerra y así las fuerzas del orden se desmoralicen y pierdan la iniciativa.En las imágenes del referido reportaje se observa, asimismo, a Quispe Palomino como un dirigente terrorista que sigue firme en su lucha contra el Estado peruano cuestionando el “Acuerdo de Paz” que plantearon en 1993 Abimael Guzmán Reinoso y Elena Albertina Iparraguirre al presidente Fujimori. También se puede apreciar que aprovecha la posibilidad del acceso a un canal de televisión para reivindicar los ataques realizados en el VRAE durante el último lustro.Finalmente, para acreditar que el armamento portado en ese acto no era producto de sus relaciones con el narcotráfico, mostró ante cámaras el número de serie de cada arma, señalando que todas eran producto de decomiso luego de las emboscadas y ataques realizados contra miembros de las fuerzas del orden. Como un trofeo de guerra exhibieron una ametralladora PKM calibre 7.62 x 54R y una dotación de munición que portaba un elemento terrorista a rostro descubierto.Un hecho que no deja de llamarnos la atención es que siendo la persona de Víctor Quispe Palomino (a) “José” un objetivo que buscan las fuerzas de seguridad y los servicios de inteligencia del Estado, éstos no puedan ubicarlo hasta la actualidad. Sin embargo, el periodista Martín Arredondo del Canal 2 de televisión lo contacta, lo entrevista y el reportaje se difunde el domingo 31 de mayo de 2009. La realidad monda y lironda es que los aparatos de inteligencia y la DINI como su ente central y rector recién toman conocimiento del contenido de la entrevista como cualquier ciudadano cuando esta se difunde. Es decir, a los servicios de inteligencia conformantes del actual Sistema de Inteligencia Nacional –como se dice en el argot popular– “se les pasea el alma”, “están en la luna”, sintonizados en frecuencia de onda corta en plena era de la globalización. ¡Despierten señores! ¡Desarrollen la iniciativa y la imaginación!Otro hecho que ha pasado inadvertido en Lima, es el intento de atentado que perpetró Sendero Luminoso el viernes 14 de agosto de 2009 contra una torre de energía eléctrica de alta tensión en la carretera Federico Basadre, cerca de la provincia de Tingo María. En dicha ocasión el comando que realizó la operación colocó cargas de dinamita en la estructura, pero ésta no llegó a colapsar y quedó suspendida por los cables. Nuevamente empieza a repetirse la misma historia, emboscadas a las fuerzas del orden, asalto a instalaciones policiales, intento de dinamitar torres lejanas, ataques a bases contrasubversivas, acciones de hostigamiento cada vez más audaces y como al inicio de los 80 se sigue subestimando la amenaza terrorista y confundiendo al enemigo. La historia se repite.Tan cierto es esto, que el 26 de agosto de 2009 siendo las 05:30 a.m. en un “combate de encuentro” que por las características del choque podríamos considerarlo como una emboscada, una patrulla del Ejército Peruano perteneciente al Batallón de Ingeniería N° 311 acantonado en Concepción —el cual forma parte de la 31a Brigada de Infantería— se enfrentó con una columna senderista en la localidad de San Antonio de Carrizales, distrito de Santo Domingo de Acobamba, provincia de Huancayo, y producto del choque fallecieron dos sargentos que se desplazaban como vanguardia de la patrulla conocida como “Wanka”.
Posteriormente desde el lugar de los hechos el general EP Luis Antonio Flores Cornejo, en su calidad de comandante general de la 31' Brigada de Infantería, manifestó que sus patrullas habían iniciado la fase de persecución a la columna senderista que causó la muerte de los dos efectivos militares. Asimismo, informó que fueron dos los enfrentamientos que sostuvieron patrullas del Ejército con la misma columna senderista, el primer choque se produjo a las 05:30 a.m. y murieron dos sargentos. El segundo fue a las 09:30 a.m y no hubo bajas que lamentar.Nuevamente vemos al igual como en la década de los 80 que se genera toda una controversia bizantina alrededor de una acción terrorista. En efecto, de un lado están aquellos que cuestionan el motivo por el cual las tropas salieron a patrullar a las 05:30 a.m en plena lluvia y sin apoyo aéreo; y por otra parte, están quienesgiran el debate en definir si se trató de un enfrentamiento o de una emboscada subversiva. Nadie va al fondo del problema. En medio de este debate bizantino el jefe del Comando Conjunto de las Fuerzas Armadas general Francisco Contreras, señaló que ese hecho fue un “combate de encuentro”, no una emboscada. Si hubiera sido una emboscada, ellos (los terroristas) no tendrían bajas.Entonces, ¿qué fue? Según observamos el escenario de los hechos, el terreno y las condiciones meteorológicas, los soldados realizaban el patrullaje en plena lluvia en un terreno que los senderistas dominan y en esas circunstancias, de acuerdo a nuestro criterio, fueron sorprendidos y emboscados y, aunque pudieron repeler el ataque, sufrieron las dos bajas. El objetivo del comando operativo terrorista fue causar intencionalmente bajas a miembros de la patrulla militar ubicados en el área de ataque para forzar a una operación de rescate por helicóptero.Independientemente de ello, tenemos que el gran conductor de las operaciones militares y como tal responsable de la estrategia militar no está compenetrado con el tipo de guerra asimétrica que practica y viene desarrollando la red terrorista Sendero Luminoso, es por eso que indebidamente se inmiscuye en decisiones operativas de bajo nivel táctico al ocuparse del empleo de una patrulla de combate cuando ello es competencia de otro escalón de menor jerarquía.Más bien debería centrar su atención en redefinir la estructura organizacional y doctrinaria de sus fuerzas para enfrentar a esta clase de guerra operando únicamente, valga la redundancia, con fuerzas especiales asimétricas y no con unidades que tienen responsabilidad territorial en la Defensa Interior de acuerdo a los planes de la DIT, para actuar contra actores no estatales internos predominantemente clandestinos y asimétricos que pueden asestar golpes terribles cuando así lo desean, utilizando cualquier medio a su disposición.Continuando con la peligrosa escalada terrorista que marca esta vez un nuevo hito de violencia y crueldad, el 2 de septiembre de 2009 se produjo un sorpresivo ataque terrorista por un comandooperativo senderista, derribando un helicóptero de fabricación rusa MI-17 de la Fuerza Aérea, en la localidad de Sinaycocha, en el distrito de Santo Domingo de Acobamba, región Junín, cuya zona está ubicada al noreste del Valle de los Ríos Apurímac y Ene, en circunstancias cuando intentaba aterrizar para recoger y evacuar a los tres miembros de otra patrulla que habían resultado heridos en una emboscada la noche anterior.
Como resultado de ese ataque fallecieron el piloto mayor FAP Angel Michael Bejarano Pacheco, el copiloto mayor FAP Jorge Lenín Sánchez Pérez y el técnico armero FAP Carlos Caicedo Castro, resultando además heridos ocho efectivos militares. Luego de ello, la columna senderista procedió a desplazarse desde sus posiciones hasta la zona donde cayó derribado el helicóptero para rematar a los sobrevivientes; sin embargo, ya no encontraron a nadie, pues habían sido evacuados por el capitán EP José Avellaneda Díaz, que formaba parte integrante de la aeronave.Empero, no obstante ello, el comando operativo senderista consiguió llevarse cuatro ametralladoras PKM calibre 7.62 x 54R, una dotación de cuatro mil cartuchos y media docena de chalecos antibalas, del helicóptero derribado, con lo cual han incrementado peligrosamente su capacidad de fuego en el. VRAE. No contentos con ese logro, culminaron el “faenón” terrorista haciendo volar con explosivos el helicóptero de la FAP a fin de inutilizarlo por completo cuando los mayores Vejarano y Sánchez se encontraban adentro muertos, cuyos cuerpos se desintegraron con el fuego atizado por el combustible.Dicho helicóptero fue derribado con ráfagas de ametralladora que impactaron al rotor, con lo cual se afectó la estabilidad de la aeronave ocasionando su caída a tierra. Ese día no se pudo rescatar los cuerpos del personal fallecido ni a los heridos, estando a que el helicóptero que hacía de sombrilla tuvo que abandonar la zona a fin de evitar los disparos de los terroristas que operaban encubiertos en el terreno. Recién el 4 de septiembre se ha podido rescatar y evacuar al personal militar herido y dos días después, esto es, el día 6, se pudo recuperar los tres cuerpos de los miembros de la FAP caídos en combate.Se debe destacar el hecho de que para los planificadores terroristas los helicópteros constituyen un objetivo remunerativo de gran valor, pues son sabedores que en el área de operaciones del VRAE representan el medio más importante que tienen las Fuerzas Armadas para el transporte de personal, traslado de equipos, municiones y racionamiento para las tropas, así como protección en los patrullajes que realizan por disposición del Comando Especial del VRAE.Es por dicho motivo que sus comandos operativos incrementan los hostigamientos y emboscadas a las patrullas del Ejército en aquellas zonas difíciles que son totalmente inaccesibles por tierra, para atraer a los helicópteros a fin de sorprenderlos, ya que conocen que las Fuerzas Armadas tienen establecido él procedimiento de venir a recoger a sus muertos y heridos.Con este hecho nuevamente se percibe en el ambiente político limeño que el Estado se muestra incapaz de combatir adecuadamente a un enemigo esencialmente asimétrico y clandestino que está generando la sensación de estar avanzando militarmente de manera progresiva en el VRAE, mientras de manera encubierta desarrolla el Accionar de los Organismos de Fachada (AOF) para complementar la ofensiva legal (OL) y la Guerra Política (GP) dentro del nuevo esquema estratégico de Guerra Revolucionaria (GR) que ejecuta con absoluta libertad en todo el país.Se debe frenar la Ofensiva Legal (OL) y la Guerra Política (GP) que viene desarrollando Sendero Luminoso contra el Estado peruano y paralelamente neutralizar políticamente el Accionar de los Organismos de Fachada (AOF), pues en la hora actual constituye el factor más peligroso de la ecuación. Debido al intenso trabajo político que vienen realizando.Para ello hay que retomar la iniciativa en el campo legal y en la guerra mediática a partir de reconocer que el desmontaje del marco jurídico que se implementó para combatir a las redes terroristas tiene su origen paradójicamente en el órgano de control de la Constitución, el Tribunal Constitucional, que con sus sentencias ha hecho posible que Sendero Luminoso retome la iniciativa.Además, dicha institución ha pulverizado a la Justicia Militar reduciéndola a su más mínima expresión, dejando así desprotegidos a los miembros de las Fuerzas Armadas, de la Policía Nacional y del Sistema de Inteligencia Nacional en la lucha contra las organizaciones terroristas, viabilizando con ello sean juzgados en los Tribunales Ordinarios —a través de una feroz persecución—imputados de violación sistemática de los derechos humanos en una guerra que no fue originada por los militares, pero en la que sí pusieron valientemente el pecho en defensa de la patria y la sociedad.Esta persecución se ha visto fortalecida por obra y gracia del gobierno parrandero de Alejandro Celestino Toledo Manrique, pues sus partidarios desde el Congreso de la República —encabezados por Carlos Ferrero Costa, el fujimorista dizque converso a la democracia— impulsaron y suscribieron las resoluciones legislativas 27517 y 27998, que tienen el grosero defecto de procedimiento de no haber sido ratificadas en dos legislaturas ordinarias, siendo por tanto, nulas y en consecuencia impracticables.Tanto la Resolución Legislativa 27517 que aprueba el Estatuto de Roma de la Corte Penal Internacional y la Resolución Legislativa 27998 que declara imprescriptible la acción penal, no tienen efecto retroactivo, pues cualquiera de los hechos acaecidos antes de su promulgación, no son imprescriptibles porque ninguna norma tiene efecto retroactivo.
Es por ello que, un grupo de parlamentarios entre los cuales destaca el ilustre jurista Javier Valle Riestra, han planteado una acción de inconstitucionalidad en el Tribunal Constitucional y si leemos el artículo primero de la Resolución Legislativa 27998, constataremos que preceptúa son imprescriptibles cualquiera sea la fecha de su comisión los crímenes de lesa humanidad y de guerra, lo cual colisiona además con el artículo 103° de la Carta Magna que consagra el principio de la irretroactividad; sin embargo, con estas irritas normas que son nulas ipso jure estamos siendo procesados quienes somos miembros de las Fuerzas Armadas o de los organismos de inteligencia por presuntas violaciones a los derechos humanos, vulnerándose los principios constitucionales de legalidad, tipicidad, seguridad jurídica e irretroactividad de las normas, afectándose los derechos de libertad y al debido proceso.Ahora bien, según hemos visto párrafos ut supra, 8 226 personas (7 224 de Sendero Luminoso y 1 002 del Movimiento Revolucionario Túpac Amaru) se acogieron a los beneficios de la Ley de Arrepentimiento, reitero, luego de confesar que eran probadamente terroristas y es por el derecho penal premial que el Estado peruano perdonó sus delitos y hoy se encuentran en libertad de acuerdo al espíritu que inspiró la dación de dicho dispositivo legal.De conformidad al principio constitucional de igualdad ante la ley, estando además al aforismo jurídico que a igual razón igual derecho y considerando que no se puede distinguir donde la ley no distingue, es que el Congreso de la República expidió la Ley N° 26479 —Ley de Amnistía— y la Ley Interpretativa N° 26495, pues el Estado peruano así como perdonó los delitos de 8 226 terroristas por su involucramiento en la guerra interna contra el propio Estado al cual buscaban destruir, éste —por el principio de equidad— hizo extensivo el perdón a los miembros de las Fuerzas Armadas, de la Policía Nacional del Perú y del Sistema de Inteligencia Nacional para hechos cometidos en la lucha contra las redes terroristas en el período comprendido entre 1980, en que se inició la guerra interna, hasta la promulgación de la Ley de Amnistía.¿Pero qué pasó después? Veamos. De los 8 226 terroristas arrepentidos nadie se ocupa ni preocupa de ellos, es decir no se les toca ni con el pétalo de una rosa, pues siguen en libertad, y no se ha declarado inaplicable la Ley de Arrepentimiento, ni menos dispuesto el procesamiento de las 8 226 personas confesas de ser terroristas. Mientras que para los militares y personal de inteligencia, insólitamente se ha declarado inaplicables la Ley de Amnistía y la Ley Interpretativa, a fin de que sigan los procesos penales en su contra. Es decir, el Estado peruano perdona a 8 226 terroristas y nadie dice ni pío. En tanto, a los militares lo angosto, es decir la ley del embudo, pues para nosotros que se aperturen nuevos juicios, se dicten mandatos de detención y se nos condene a como dé lugar. ¿Esto es igualdad ante la ley? ¿Así quieren que las FuerzasArmadas enfrenten a las redes terroristas en el VRAE? ¿Por qué el Estado perdona a los terroristas y no a los militares? ¿Por qué se aplican normas retroactivas para juzgar al personal de las Fuerzas Armadas y de la Comunidad de Inteligencia? ¿Eso es justicia?Dentro del esquema estratégico de Guerra Política (GP) que viene desarrollando Sendero Luminoso contra el Estado peruano el hecho de mayor connotación ha sido sin lugar a dudas como es que Abimael Guzmán Reinoso ha logrado acaparar la atención política y mediática del país —durante varios días— a partir del 12 de septiembre de 2009 tras 17 años de su captura, al presentar su libro titulado “De puño y letra” a través de su abogado Alfredo Crespo Bragayrac.Lo anecdótico y risible es que Guzmán rechaza que los “tilden de terroristas e impute terrorismo”, pues considera que son “revolucionarios” militantes del Partido Comunista del Perú y participantes o dirigentes de la guerra popular iniciada el 17 de mayo de 1980. ¡Como si el asesinato de María Elena Moyano por un comando operativo senderista y dinamitar luego su cadáver, fuera un acto “revolucionario” y no un ataque terrorista!La presentación de este libro y el momento elegido para darlo a conocer públicamente constituye una auténtica operación psicológica realizada dentro del contexto de la Guerra Política (GP) que ha producido el efecto deseado por los planificadores terroristas, pues lograron su objetivo de obtener la máxima difusión a nivel nacional e internacional de ese evento por la reacción desproporcionada del Estado.En otro enfoque del tema que nos ocupa, debemos puntualizar que al encontrarnos en la era de la informática, la amenaza del “terrorismo cibernético” podría aumentar en el futuro los niveles de letalidad de Sendero Luminoso, hecho que debería generar una mayor preocupación en el Gobierno y en los servicios de inteligencia, pues esta modalidad de amenaza constituye un peligroso factor de perturbación a la Seguridad Nacional que nos obliga a coordinar la protección de los sistemas de información.En esta línea de pensamiento, tenemos que dicha red terrorista opera en coalición con otras redes y ello les brinda un potencial destructivo muy vasto con el uso de la tecnología de la información, ya que podrían atacar desde cualquier punto geográfico las computadoras conectadas con la internet a través de hackers que están en capacidad de poder violar la seguridad de las computadoras de cualquier empresa o corporación de agencias de Gobierno, entidades bancarias, universidades —entre otras— penetrando en sus sistemas para sustraer información protegida, cometer fraude financiero, perpetrar sabotaje de datos y en redes, y propagar virus informático.
En ese orden de ideas “el terrorismo cibernético” es otra táctica de ataque en el campo del internet y la informática, en que las instrucciones en las computadoras constituyen la modalidad empleada para producir caos. Este factor de perturbación es tan peligroso que China ha reconocido de manera pública el rol que desempeñarán los ataques cibernéticos que se podrían efectuar en Occidente.En efecto, los coroneles del ejército de China, Qiao Liang y Wang Xangsui, en su libro “Guerra irrestricta” señalan que “la primera regla de la guerra irrestricta es que no hay reglas, nada está prohibido (...) una catástrofe bursátil planificada, un ataque con virus a las computadoras, convertir en erráticas la taza de cambio de un país enemigo y esparcir rumores en la internet sobre los líderes de un país enemigo pueden considerarse nuevas y originales formas de usar las armas”.Con esta obra los dos oficiales superiores chinos iniciaron una revolución en el ámbito de la doctrina militar y en las teorías sobre la guerra asimétrica, vislumbrando un escenario mundial en que las amenazas desbordan el marco estrictamente militar y utilizan procedimientos y métodos prohibidos por las normas del derecho internacional.
En la página 84 de mi libro “Guerra sin Rostro”, he señalado que “el terrorismo cibernético” que como una táctica de ataque emplean las redes terroristas, tiene una peligrosa técnica conocida como “operación liquidación” que se usa con la finalidad de atacar la estructura entera de un país. También precisé en dicho texto, que esta operación se podía desarrollar en varios países sobre el blanco elegido. Ahora bien, bajo los principios de utilidad, pertinencia y conducencia a los fines de conocer esta modalidad de amenaza, describiré cada una de las fases.La primera, se iniciaría colapsando el sistema de tráfico vehicular y los medios de transporte colectivo, bloqueando las luces de todos los semáforos que se pondrían en color verde al unísono. Los ferrocarriles presentarían fallas críticas en su operatividad. Los sistemas de control de tráfico aéreo se caen, poniendo a las compañías de aviación en alerta máxima. El caos generalizado es el objetivo de esta fase y tecnología, cuyos ejes se podrían resumir en dos palabras: “tráfico y tecnología”.En la segunda fase la población supuestamente entraría en pánico colectivo al haberse caído el transporte terrestre y aéreo por fallas en los sistemas de computación, que son manipulados por hackers desde lugares desconocidos. También es posible, como decíamos, proceder a bloquear la bolsa de valores y el sistema bancario, así como las telecomunicaciones, presentándose videos con imágenes tergiversadas de líderes políticos en escenarios irreales para desconectar y producir mayor zozobra, siendo los ejes de esta fase: “Financieras y Telecomunicaciones”.En la tercera fase se buscaría bloquear el uso de elementos vitales como agua y energía, y bien se podría descargar una alarma de ántrax para que la ciudadanía evacue los edificios públicos y privados así como sus centros laborales. Paralelamente se podría practicar el terrorismo virtual a través de emisiones televisivas que difundirían imágenes destructivas falsas sobre derrumbes de edificios públicos o locales emblemáticos, a fin de crear un mayor desconcierto y que el Gobierno pierda el control de la situación. Es por ello que la situación es denominada como “liquidación” porque arrasa con todo.Estando al escenario descrito precedentemente, tenemos que pensar que los planificadores de la red terrorista Sendero Luminoso bien podrían utilizar el “terrorismo cibernético” en sus futuros ataques, lo que nos obliga a prepararnos para no ser sorprendidos con un golpe que pueda utilizar esta táctica.
Un claro indicio de ello es la constante presencia en Internet, donde se puede observar que Sendero Luminoso está incursionando en redes sociales como Hi5 y Facebook propagando mensajes y difundiendo su ideología subversiva entre la juventud porque son las personas que utilizan este medio con mayor frecuencia. Vemos, pues, que dicha red terrorista aprovecha todas las herramientas tecnológicas a su alcance, porque la Internet les permite incluso mantenerse en la clandestinidad. El mejor ejemplo es que Jorge Quispe Palomino (a) “Raúl” ha colgado en YouTube videos en que aparece interpretando canciones subversivas.Si ingresamos en la red www.hi5.com y en www.facebook. com encontraremos un apreciable número de seguidores, con lo cual se acredita que Sendero utiliza una moderna generación de cuadros especializados en informática para atacar los ciberespacios, defendiendo su ideología, reclutando personal y entrenando a sus comandos operativos y particularmente actuando para ejercer el comando y control de sus militantes.Debemos señalar que hoy “los terroristas no tienen Estado y constantemente están en movimiento; sus estructuras organizacionales están siempre en flujo y la única cosa predecible es que serán impredecibles. Y cuando se comunican, sus frecuentes mensajes se unen a millones de otras piezas de comunicación –emails, celulares y transferencias de data– alrededor del mundo y a la velocidad de la luz en una compleja red digital de bites y fotones”. (James Banford, Body of Secrets: Anatomy of the Ultra Secret Nacional Security Agency, 2002, p. 650).Para combatir eficazmente a un enemigo engañoso, decidido, letal y que es espectacular en sus ataques, que adapta su forma de entablar la guerra operando fuera del paradigma de un estado-nación y que practica la guerra asimétrica como variable de la 4GW, ¿cómo debería actuar un Estado frente a esta clase de amenazas?Debe prepararse adecuando sus políticas, estrategias y tácticas a este modo de guerra redefiniendo las concepciones organizacionales, doctrinarias y operacionales de las Fuerzas Armadas, de tal forma que se encuentren en óptimas condiciones de dar una respuesta integral y no puramente militar ante una amenaza que no distingue lo civil de lo militar, la paz de la guerra y en que el campo de batalla es el conjunto de la sociedad.Para este tipo de conflictos hay que saber diferenciar la estructura organizacional de fuerzas que desarrollan estrategias simétricas, de la estructura organizacional de fuerzas que desarrollan estrategias asimétricas. El principio de combinación de estrategias y fuerzas simétricas con las asimétricas, sólo se utiliza contra cualquier potencial adversario como Chile cuyos medios y potencial militar es notoriamente superior a los nuestros.Este principio no se usa para combatir a Sendero Luminoso, al que se debe enfrentar con nuestras fuerzas de operaciones especiales combinadas de las fuerzas armadas, pues constituyen el enemigo más peligroso para las redes terroristas. ¿Por qué? Porque son fuerzas asimétricas por antonomasia.Durante el desarrollo de la presente obra he tratado con el mayor rigor posible de narrar el rol desempeñado en la década de los 90 por el Servicio de Inteligencia Nacional (SIN) bajo la jefatura del general de división EP Julio Salazar Monroe en la lucha contra las redes terroristas y cómo es que dicha institución me asigna la misión de conducir personalmente como oficial del caso, las respectivas Operaciones Especiales de Inteligencia que lograron la capitulación de Abimael Guzmán Reinoso y de Elena Albertina Iparraguirre Revoredo y posteriormente la división o escisión de Sendero Luminoso que culminó con la ruptura orgánica de esta agrupación terrorista.
Es así que, cumpliendo con dicha misión como oficial de inteligencia, estuve frente a frente, nada menos que con Abimael Guzmán Reinoso, desarrollando ambas partes una confrontación dialéctica, una verdadera lucha de dos líneas de pensamiento totalmente contrapuestas entre sí, la mía, que abogaba por la vida y la defensa de la persona humana y el respeto de su dignidad como fin supremo de la sociedad y del Estado; mientras que la otra, la de Guzmán, hacía gala de desprecio por la vida con tal de cumplir su objetivo político de destruir el Estado e implantar el comunismo en el Perú.Considerando que la red terrorista Sendero Luminoso venía practicando la Guerra Asimétrica como variable principal de la Guerra de Cuarta Generación (4GW) contra el Estado peruano, era consciente que este tipo de guerra doctrinariamente habría que librarla desde un alto terreno moral teniendo como ejes centrales, primero las ideas y, luego, la tecnología, toda vez que los factores de dominación en esta clase de conflictos no son aquellos que provienen de la tecnología sino los que derivan de las ideas.
Teniendo como marco de referencia conceptual estas vigas maestras di inicio a una inédita Operación Especial de Inteligencia, que ha sido única en la historia de la Comunidad de Inteligencia Peruana, un auténtico reto en mi carrera como Oficial de Inteligencia, y por supuesto una enorme responsabilidad que asumí conscientemente, pues debía demostrar la superioridad ética del Estado frente a la violencia homicida de Sendero Luminoso.La gente con la que trataba no le interesa en absoluto las reglas; todo lo que les importa son los resultados de sus acciones destructivas y letales. Mi trabajo como hombre de inteligencia era detenerlos antes que logren sus objetivos: causar más muerte y destrucción en el Perú.Premunido de paciencia y perseverancia con el acopio de abundante información para cotejarla y ayudado con la música, un arte aparentemente inofensivo, todos estos elementos fueron mi poderosa y eficaz arma para enfrentarme contra quienes buscaban por la vía violenta destruir al Estado y yo como su representante debía impedírselo sin usar la violencia.
El Estado peruano en ese entonces y una institución como el Servicio de Inteligencia Nacional (SIN) usaron este tipo de medios y recursos para obtener algo tan trascendental, como la capitulacióny luego la división y subsecuente ruptura orgánica del sanguinario y genocida grupo terrorista Sendero Luminoso, y para ello sus más altos e importantes cabecillas y mandos operacionales con los que contendí personalmente, no fueron objeto de tortura cruel alguna, ninguna forma de atentado contra la vida, el cuerpo y la salud, ninguna humillación que vulnere sus derechos humanos, pues el Estado se situó en un alto terreno moral.El mejor testimonio documentado de ello, es la carta que me entregara Abimael Guzmán Reinoso, como jefatura, la “camarada Miriam”, como dirigente, ambos integrantes de la dirección central del Partido Comunista del Perú y nueve militantes de alto nivel de dicha organización donde reconocen mi “...tesonero esfuerzo y dedicación a la causa de la consecución de la paz en cuyos avances le (me) corresponde una decisiva actuación (...) el partido siempre ha de tener presente el papel fundamental que usted ha cumplido y continúe desempeñando en la histórica y difícil brega por la obtención de un acuerdo de paz y su cabal y completa aplicación en beneficio del pueblo, la nación y la sociedad peruana.” (sic)
Ese ha sido mi trabajo profesional que como oficial de inteligencia me asignara el Servicio de Inteligencia Nacional en la lucha contra las redes terroristas. Siempre apostando por la vida y la defensa de los derechos fundamentales de la persona humana y el respeto de su dignidad. Por ello repugna a mi formación cristiana, a mis propias convicciones como hombre de inteligencia y a mi condición de abogado cualquier acto que atente contra la vida, el cuerpo y la salud de toda persona sin distinción alguna.En tal virtud resulta inaudito que se me impute injustamente en los lamentables y perversos sucesos del caso de Barrios Altos y otros, ser autor mediato de homicidio calificado y secuestro agravado en agravio de víctimas que nunca debieron ser vilmente asesinadas o desaparecidas.Por esos hechos estoy procesado y el entonces Fiscal Superior doctor Pablo Sánchez Velarde en su acusación escrita del 11 de mayo de 2005 ha solicitado se me imponga 35 años de pena privativa de la libertad. Luego al iniciarse el Juicio Oral y presentar su caso dicho Fiscal Superior el 7 de septiembre de 2005 reiteró su pedido que se me imponga los 35 años de pena privativa de la libertad.Concluido el debate oral en el referido proceso y al formular su requisitoria oral el 10 de junio de 2009, el nuevo Fiscal Superior doctor Jorge Cortez Pineda, ha solicitado se me imponga 25 años de pena privativa de la libertad (¿su antecesor se extralimitó al emitir el dictamen contra el texto claro y expreso de la ley, pidiendo una pena de 35 años?).
Habiendo demostrado mi trabajo y el rol del SIN en la pacificación nacional considero injusta semejante acusación, pues soy inocente de esos hechos. Usted, amable lector, ¿cree que soy culpable? ¿Me merezco una sanción de 35 o de 25 años de pena privativa de la libertad? Resulta paradójico que Abimael Guzmán Reinoso, el líder de Sendero Luminoso, y los principales cuadros de su organización reconozcan “mi esfuerzo y dedicación a la causa de la consecución de la paz” en cuyos avances puntualizan y señalan me “corresponden una decisiva actuación”, y por otra parte que el Estado peruano, al que defendí logrando la capitulación y luego la división que acarreó la ruptura orgánica de Sendero Luminoso en dos bloques antagónicos entre sí, pretenda sancionarme con 35 ó 25 años de prisión.La guerra impulsada por la red terrorista Sendero Luminoso nace en los 80 de una convocatoria política que se apoyaba en la crítica a la acumulación de injusticias y desigualdades. Es una rebelión contra un Estado premoderno y colonialista. Por eso ya es tiempo que el problema de Sendero Luminoso sea visto desde una lógica político-social. Hay que meditar sobre todo lo ocurrido durante los 29 años de guerra interna y ver dónde estuvieron los errores del Estado. No debemos olvidar las lecciones del pasado.Parece ayer cuando en mayo de 1980 un comando operativo senderista atacó la oficina distrital del Jurado Electoral Provincial en el distrito de Chuschi y quemó públicamente las ánforas y padrones electorales. Entonces las autoridades limeñas decían: “Son abigeos”. Años después esos “abigeos” causaron decenas de miles de muertes y la pérdida de miles de millones de dólares en daños materiales.Hoy, después del asesinato de 14 soldados del Ejército Peruano como consecuencia de la doble emboscada en Sanabamba el 9 de abril de 2009, del asalto frustrado el 1 de agosto de 2009 a la base policial de San José de Secce, que según hemos visto causó cinco muertos, y del derribamiento de un helicóptero MI-17 de la FAP en la localidad de Sinaycocha, por una columna senderista el 2 de septiembre de 2009, que igualmente hemos visto causó tres muertos y ocho heridos, en Lima se sigue reduciendo esa amenaza terrorista a un problema estrictamente policial, pues se dice que los atacantes que integran los comandos operativos senderistas son “sicarios del narcotráfico”.No aprendemos de lo que nos pasó por subestimar la amenaza y confundir al enemigo. Estamos frente a redes terroristas que constituyen un factor de perturbación a la Seguridad Nacional. Eso no hay que olvidarlo.A ello debemos agregar que en el frente externo tenemos para el mediano plazo otro grave problema de Seguridad Nacional: Chile prepara otra guerra contra el Perú. A eso obedece la carrera armamentista en que están enfrascados. Hay que tener mucho cuidado. Con esta otra amenaza.

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